Qatar 2022: la repudiable canción racista y homofóbica de los fans argentinos. Y todavía les aplauden

Qatar 2022 tiene entre sus principales favoritos para coronarse a Argentina. No hay duda: la selección de Lionel Scaloni contará con un apoyo masivo en el Mundial y esos fieles harán todo por poner ese respaldo para su equipo en otro nivel. No se puede negar que la hinchada argentina es una de las que más colorido aporta en cada competencia de este tipo. Son diferentes al momento de crear cantos y coordinarse para que sus voces se escuchen más que la de cualquier otra afición.

Ya con la fiebre mundialista al 100%, las calles de Qatar dejan ver a muchos aficionados albicelestes que aguardan ansiosos por el estreno argentino contra Arabia Saudita, el próximo día 22 (martes a las 04:00 am hora de la CDMX). La Scaloneta, como se conoce al combinado desde hace un par de años, ha despertado una ilusión no recordada desde hacía tiempo. Los fans ya han empezando a desperdigar algún cántico, pero los elementos de su tonada más famosa son más que cuestionables.

Aunque Argentina no se medirá con Francia en la primera ronda —pero sí podría pasar en octavos de final—, los fans han dedicado una canción a la selección gala, que les eliminó del pasado Mundial de Rusia 2018 con un 4-3 en octavos de Final. La canción se dio a conocer durante un programa del canal TyC Sports, mientras se realizaba un enlace en vivo. El reportero abrió el micrófono para los aficionados, que cantaron lo siguiente, dedicado para la selección francesa: "Corran la bola, juegan en Francia pero son todos de Angola. Qué lindo es, van a correr, son cometrabas como el puto de Mbappé. Su vieja es nigeriana, su viejo, camerunés...".

La reacción del reportero fue de desaprobación: "No, no, censurada, esa no la banco (apoyo)", soltó luego de escuchar el cántico. En redes sociales, el tema se volvió un boom y fue abrazado por miles de fanáticos que aplaudieron la "creatividad" del tema, además de regodearse por la forma en que saben "romper las reglas" e ir contra marea. Sería buen momento para traer a cuento la doble moral que caracteriza a la FIFA y todos sus estamentos: a México le ha sancionado en un sinfín de ocasiones porque el grito homofóbico cuando el portero despeja, pero aquí, desde luego, no habrán ni siquiera una llamada de atención. Todo sea en nombre del folclore. Y ya ni hablar de cómo pudo llegar la Copa del Mundo, de manera consecutiva, a dos países abiertamente homofóbicos.

Aunque, a decir verdad, es extraño el resentimiento mostrado contra Francia. Mbappé, al que señalan de tener madre nigeriana y padre camerunés, les hizo dos goles en el Mundial anterior y ganó la Copa del Mundo con 19 años. Francia solo tiene a un futbolista nacido en Angola. Es Eduardo Camavinga, centrocampista del Real Madrid. Nunca se ha confirmado que Mbappé tenga una relación una mujer transexual (y si eso pasara, sería asunto suyo y de nadie más), pero usaron eso a modo de insulto.

La multiculturalidad, de la que Francia ha sacado grandes provechos deportivos y que representa una forma de vencer prejuicios raciales y de etnia, no parece entrar en la mente de estos aficionados argentinos que exteriorizan su racismo sin ningún rubor, impunemente, porque al final del día en Twitter van a tener a todo un coro de aplaudidores. Esa es la presunta gracia: decir cosas atrevidas, que se salgan de la "corrección política", y que millares respalden eso porque creen que es sinónimo de rebeldía.

¿Hará algo la policía de Qatar para impedir estos cánticos? ¿Interrumpirán transmisiones en vivo como hicieron con el reportero danés? ¿Lanzará la FIFA un comunicado amenazando a los fans que canten esto, y multando económicamente a la Federación Argentina si sus aficionados hacen caso omiso?

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