Egan Bernal: el papel que desempeña en el Tour de Francia y por qué no está en los puestos de privilegio

Egan Bernal: una trayectoria ciclística atravesada por un grave accidente
Egan Bernal: una trayectoria ciclística atravesada por un grave accidente - Créditos: @Instagram

“Diosito le da sus peores batallas a sus mejores guerreros”, posteó en las redes sociales el ciclista colombiano Egan Bernal, unos días después del accidente en el que milagrosamente se salvó su vida.

El 24 de enero de 2022, Bernal realizaba un entrenamiento contrarreloj, cerca de Bogotá en la ruta que une la capital colombiana con la localidad de Tunja, junto a un grupo de gregarios y compañeros de equipo. Apoyó su cuerpo en la bicicleta y estiró el torso hacia adelante buscando la posición más aerodinámica posible, lo que le permitió aumentar la velocidad. Con la cabeza gacha, Bernal no vio que un ómnibus se detuvo a bajar un pasajero en una zona de circulación rápida e impactó contra la parte trasera del micro, a 50 km/h sin tocar el freno. Inmóvil y agonizante, quedó tendido en el suelo. A partir de ese trágico instante, su nueva carrera, la más importante de su vida ya no fue pedaleando, fue ganarle a la muerte.

El ciclista Egan Bernal luego de impactar contra un colectivo en la ruta que conecta Bogotá con la localidad de Tunja
El ciclista Egan Bernal luego de impactar contra un colectivo en la ruta que conecta Bogotá con la localidad de Tunja - Créditos: @Captura

Lo trasladaron de inmediato a la Clínica La Sabana, donde lo sometieron a un total de cinco cirugías de alto riesgo. El parte médico indicó que Egan Bernal sufrió un trauma de cráneo, una fractura de columna cervical no desplazada, la perforación del pulmón con presencia de aire y sangrado en la cavidad torácica, fractura de la vertebra torácica t5 y t6, la fractura del fémur y de la rotula derecha.

Cuando el ciclista se despertó, luego de la última intervención, contó que el cirujano le dijo: “El 95% habría muerto o quedado parapléjico”. El cirujano le explicó que fue una cirugía muy grave y que en su carrera había operado cientos de columnas, pero que como esa, sólo dos habían salido bien. “Yo era la segunda”, dijo Bernal.

El día del accidente Bernal se preparaba para competir en el Tour de Francia, la carrera que le permitió ganarse un lugar en el Olimpo de los ídolos. En 2019, el colombiano fue el primer latinoamericano en vestirse con el maillot amarillo que luce el ganador del Tour, la carrera ciclística más importante del mundo, y además coronarse siendo el más jóven en los 110 años de historia de la competencia.

El primer latinoamericano en ganar el Tour de Francia

Bernal alcanzó la gloria que los colombianos, amantes y fanáticos del ciclismo soñaron durante mucho tiempo: el Tour de Francia y la Triple Corona (Tour de Francia, Vuelta de España y Giro de Italia). En su memoria atesoran la subida del Col de l’Iseran, el punto más alto del Tour 2019, con 2.764 kilómetros de altura, cuando Egan se calzó el maillot amarillo y no se lo sacó hasta llegar a los Campos Elíseos.

Tour de Francia - La etapa 21 de 128 km desde Rambouillet hasta los Campos Elíseos de París 28 de julio de 2019 - El piloto del equipo INEOS Egan Bernal de Colombia, vistiendo la camiseta amarilla del líder general, en acción frente al Arco del Triunfo.
Tour de Francia - La etapa 21 de 128 km desde Rambouillet hasta los Campos Elíseos de París 28 de julio de 2019 - El piloto del equipo INEOS Egan Bernal de Colombia, vistiendo la camiseta amarilla del líder general, en acción frente al Arco del Triunfo. - Créditos: @REUTERS/Gonzalo Fuentes

El ciclista recibió el alta el médica el 6 de febrero y comenzó una larga y dura rehabilitación. En un principio el objetivo fue volver a caminar y comprobar que su columna y las vértebras afectadas en el accidente no estaban dañadas. El siguiente paso fueron ejercicios sencillos para mejorar la motricidad de su cuerpo, y finalmente se puso a prueba en la bicicleta estática para recuperar su ritmo de pedaleo.

Dos meses después del accidente, Bernal compartió imágenes entrenándose en bicicleta por las carreteras colombianas anunciando su recuperación y comenzó a alimentar la esperanza de su vuelta al ciclismo.

Volver a soñar

El16 de agosto de 2022, a casi siete meses de su accidente, Egan volvió a competir en el Tour de Dinamarca, donde mostró claras señales de su recuperación pero no pudo finalizar la carrera, y lo mismo ocurrió en el Tour de Alemania. Cerró el 2022 con la participación en dos clásicas italianas, la Coppa Sabatini y el Giro della Toscana. El milagro era un hecho, solo faltaba el sprint final: volver a ser el deportista de elite que fue antes del accidente.

Bernal comenzó el 2023 muy activo. Corrió la Vuelta de San Juan, que no logró finalizar por una caída, y lo mismo le sucedió en la Vuelta de Cataluña. Luego encadenó una serie de buenos desempeños que de dieron lugar a la ilusión por volver a ser protagonista en las grandes vueltas. Primero fue el Tour de Romandía, donde logró el octavo puesto, lo mismo que en Tour de Hungría y finalmente alcanzó el 12do lugar en la clasificación general en el Critérium du Dauphine.

El 1 de julio de 2023 arrancó en Bilbao la edición 110 del Tour de Francia, donde Tadej Pogacar y Jonas Vingegaard se presentaban como los principales candidatos, pero Egan Bernal aparecía como uno de los posibles ciclistas a disputar la punta de la carrera junto a los dos europeos.

La expectativa duró poco y en las primeras etapas quedó claro que el colombiano está en buena forma pero todavía lejos de los puestos de liderazgo. El ciclismo es un deporte en el que los líderes necesitan de un equipo que los apoye y de compañeros que se sacrifiquen por ellos. Egan Bernal entendió que éste no era su momento y asumió el rol de partenaire de su compañero en el equipo INEOS Grenadiers, el español Carlos Rodríguez, que pelea por alcanzar el tercer lugar en la carrera y marcha en la cuarta posición de la clasificación general a cinco segundos de Adam Yates.

La nueva tarea de Bernal no solo incluyó “tirar” en carrera de Rodríguez, también se lo vio haciendo tareas menores pero valiosas como acercarle caramañolas con agua. El director del equipo británico INEOS Grenadiers se refirió al nuevo rol del colombiano: “Egan Bernal tomó la decisión de ayudar a un compañero que se encuentra en mejor forma que él. Se lo vio llevando bidones por los demás, trabajando en el frente, así que muy bien. Al final la clase es la clase”.

Luego de finalizar la contrarreloj de la etapa 16 del Tour de Francia, Egan dijo: “Ayer no salí a entrenarme. Estaba reventado y le dije al entrenador que quería estar un día sin bicicleta”. Luego explicó las razones por las que pidió el día de descanso: “Espero estar muy bien para poder apoyar mañana a ‘Carlitos’. Le tengo mucho aprecio, es un buen chico y a su edad yo me encontré en una situación parecida. Haré hasta donde pueda para ayudarlo”.

A Bernal, la vida le regaló una nueva oportunidad y aunque todavía no logra alcanzar el esplendor que tuvo antes del accidente, queda claro que aprendió de lo vivido y esta dispuesto a dar pelea desde el lugar que hoy le toca. Lejos de los primeros lugares y del brillo del éxito, entendió la situación y con enorme humildad se olvidó de la gloria del pasado para convertirse en un gregario de lujo y en un ejemplo de grandeza.

Jonas Vingagaard amplía su ventaja

El danés Jonas Vingegaard está encaminado a quedarse con el maillot amarillo por segundo año consecutivo después de que el amplió su ventaja sobre su más cercano rival Tadej Pogacar. El campeón defensor dejó atrás a Pogacar, que terminó agotado, en la 17ma etapa en los Alpes y amplió la diferencia a siete minutos y 35 segundos. Si no se registra ningún choque de gran magnitud, parece que ganará su segundo título en el Tour.

“No esperaba tener tan buen día. Es difícil de describir. Digamos que me siento muy aliviado. Conseguir una ventaja de siete minutos es fantástico. Sin embargo, todavía no estamos en París; quedan etapas bastante tramposas”, advirtió Vingegaard.

La competencia termina el domingo 23 en la capital francesa y sólo queda una etapa complicada, el sábado en la región de Alsacia, con un ascenso de 3.600 metros.