Donald Trump: el apoyo al LIV Golf, una bolsa de 50 millones de dólares y un “pelotazo” para Joe Biden

El expresidente Donald Trump y una salida desde el tee, en uno de los hoyos del Trump National Doral Miami Golf Club, este jueves, en el Pro Am previo al torneo del LIV
El expresidente Donald Trump y una salida desde el tee, en uno de los hoyos del Trump National Doral Miami Golf Club, este jueves, en el Pro Am previo al torneo del LIV - Créditos: @GIORGIO VIERA

Este fin de semana se disputará el último torneo de la temporada del LIV Golf, el nuevo circuito impulsado por capitales árabes, y cuya creación generó una fuerte controversia y el alejamiento de varias estrellas de este deporte del PGA Tour. Este último certamen se realizará en un lugar especial: nada menos que el Trump National, cerca de Miami. Un escenario cuyo dueño es, justamente, el expresidente de los Estados Unidos, Donald Trump.

Trump, luego de reunirse con los golfistas, fue contundente en sus declaraciones. El empresario expresó que el PGA se equivocó al no llegar a un entendimiento con LIV Golf, el nuevo tour, además de llenar de elogios a la nueva competición y a sus patrocinadores sauditas. ”El PGA Tour realmente desperdició una gran oportunidad y ahora están en una posición mucho más difícil”, declaró Trump a los periodistas después de jugar 18 hoyos en el Pro Am. ”Es un gran momento, mucho dinero, dinero ilimitado. Ellos realmente aman el golf y los sauditas han hecho un trabajo fantástico”, afirmó.

Donald Trump junto a sus hijos Donald junior, Eric y Brooks Koepka, en el Trump National Doral Miami GC
Donald Trump junto a sus hijos Donald junior, Eric y Brooks Koepka, en el Trump National Doral Miami GC - Créditos: @GIORGIO VIERA

Al ser consultado sobre si LIV representa el futuro del golf, Trump fue más cauto, aunque culpó a los dirigentes del PGA por el cisma que vive este deporte. ”No lo sé, creo que al final quizás se solucione algo, pero el circuito lo ha manejado muy mal, la gente de la cúpula... algo debería pasar con ellos, lo han manejado muy mal”, dijo. ”Están tratando con gente muy buena, con dinero ilimitado. Se podría haber resuelto algo muy fácilmente y el circuito decidió evadirlo, eso no les salió muy bien”, insistió.

LIV Golf, financiado por el fondo de inversión pública de Arabia Saudita, ha realizado una inversión sin precedentes en este deporte que le permitió reclutar a figuras de PGA como Dustin Johnson, Phil Mickelson o Sergio García, quienes fueron después suspendidos del circuito estadounidense. En el torneo de este fin de semana, el flamante tour ofrece una bolsa de premios de 50 millones de dólares.

Donald Trump,  Kai Trump, Brooks Koepka, Sergio García y Eric Trump posan para una foto durante el Pro Am realizado el jueves
Donald Trump, Kai Trump, Brooks Koepka, Sergio García y Eric Trump posan para una foto durante el Pro Am realizado el jueves - Créditos: @GIORGIO VIERA

Pero los críticos del nuevo circuito aseguran que es una nueva estrategia del régimen saudita para lavar su imagen internacional ante las denuncias por violaciones de los derechos humanos. En la actualidad, PGA y LIV sostienen varias batallas legales sin que haya señales de un acuerdo cercano para resolver el conflicto. El número 1 del mundo, Rory McIlroy, uno de los mayores defensores del PGA, dijo esta semana que temía que la ruptura fuera “irreparable”.

La controvertida primera temporada del LIV concluye en el Blue Monster de Doral. Durante el Pro Am, abundaron las risas y las bromas. Cuando Trump y sus acompañantes llegaron al tee del hoyo 10, sus seguidores lo esperaban. “¡Ese swing parece estar listo para otros cuatro años!”, gritó uno, mientras Donald se iba al agua con un drive decente. “¿Crees que Biden podría hacer eso?”, preguntó el 45º presidente de los Estados Unidos. “No lo creo, no llegaría ni al tee [de las damas]”, disparó a continuación. Tampoco pudo Eric Trump, que envió su tiro a un estanque infestado de caimanes. Todo, mientras los agentes del servicio secreto patrullaban los fairways.

El Abierto de Doral fue un torneo del PGA Tour entre 1962 y 2006, cuando ganó Tiger Woods. El astro volvió a imponerse en 2007 en lo que se había rebautizado como World Golf Championship, una serie de torneos creada para evitar un desafío al statu quo y liderada por Greg Norman. El australiano, ahora, es el referente de todo lo relacionado con el LIV. Ya no hay sombreros con la marca WGC en la tienda de golf. En su lugar, las gorras de Make America Great Again (MAGA, el logo con el sello de Trump) cuestan 36 dólares.

En todo caso, es innegable que el LIV ha sacudido los cimientos del golf mundial. Un terremoto en el que los 2.000 millones de dólares del Fondo de Inversión Pública de Arabia Saudí han contribuido, naturalmente, pero la visión de los grandes campeones atendiendo a la prensa en los últimos días refrendó la sensación de que la LIV demostró que muchos escépticos estaban equivocados. Trump jugó el jueves con dos de los nuevos nombres del LIV Tour, Brooks Koepka y Sergio García, en nueve hoyos sucesivos. “Fue divertido, lo disfruté”, dijo Koepka. “No me dio ningún consejo porque no quería que le ganara. Pero la pasamos muy bien, siempre es divertido jugar con él. La verdad es que tiene un putter bastante bueno”, agregó. Hay que tener en cuenta que varios de los golfistas profesionales de los Estados Unidos suelen inclinarse hacia la derecha... políticamente hablando.

Donald Trump observa a su nieto Kai jugando en el Doral Miami GC, en Florida
Donald Trump observa a su nieto Kai jugando en el Doral Miami GC, en Florida - Créditos: @GIORGIO VIERA

“No tengo ningún problema”, dijo García cuando se lo consultó sobre si había perdido amistades por su decisión de mudarse a la LIV. “Le estás preguntando a la persona equivocada. Es todo lo que voy a decir. No tengo ningún problema con ninguno de ellos [los del PGA Tour]”. Este es el octavo torneo del nuevo tour. Otros, disputados entre Londres y Bangkok, han suscitado cierto interés, sin que nadie, más allá de los más fanáticos del golf, parezca estar muy al tanto sobre ganadores o perdedores. Al flamante circuito le falta aún un acuerdo de transmisión principal por TV, lo que limita su difusión. Y el hecho de que aún no haya recibido la aceptación del Ranking Mundial de Golf es otra barrera para su avance. Así continúa una feroz lucha de poder.