Diego Schwartzman se despidió en la tercera rueda de Roland Garros ante Stefanos Tsitsipas y saldrá del top 100 por primera vez desde 2014

Argentina's Diego Schwartzman reacts after missing a shot against Greece's Stefanos Tsitsipas during their third round match of the French Open tennis tournament at the Roland Garros stadium in Paris, Friday, June 2, 2023. (AP Photo/Jean-Francois Badias)
Diego Schwartzman, frustrado, no opuso resistencia ante un iluminado Stefanos Tsitsipas y se despidió en la tercera etapa de Roland Garros - Créditos: @Jean-Francois Badias

PARÍS (Enviado especial).– Diego Schwartzman se muerde los labios. Gira su cabeza hacia el rincón del court Suzanne-Lenglen, el segundo en jerarquía de Roland Garros , donde se ubica el puñado de personas que lo acompañan. Busca explicaciones, pero no las encuentra. Se frustra, se acomoda la gorra, maldice, se siente impotente, vuelve a acomodarse la gorra. Al margen de que su nivel ya no es el de otros tiempos, es el rival el que tiene la mayor porción de la culpa de lo que sucede sobre el polvo de ladrillo. Stefanos Tsitsipas , quinto preclasificado, finalista en el Bois de Boulogne hace dos años, luce altamente superior al Peque: en velocidad, pureza de impactos, precisión en el saque, desplazamientos... No hay vuelta atrás. Esta vez, el porteño no tiene chances y se despide en la tercera rueda. El griego, con contundencia, lo derrota por 6-2, 6-2 y 6-3, en 2h3m.

Hubo algunos escasos momentos en los que Schwartzman se afirmó, logró frenar el envión de Tsitsipas, levantó los brazos tratando de contagiarse de los aplausos que le obsequió el público e impactó con pimienta y altura..., pero no prosperaron en el tiempo; fueron momentos efímeros, apenas. Tsitsipas, dueño de un latigazo de revés de una mano y de una capacidad atlética extraordinaria, le hizo pasar un mal momento al argentino que había llegado con muy poca energía a París y que, luego de ganar dos partidos (ante el español Bernabé Zapata Miralles y el portugués Nuno Borges), se marcha al menos un poco mejor de ánimo, con algunas certezas más que las que acarreaba en la valija.

La caída frente al quinto del ranking mundial no deja de ser lógica para Schwartzman, que en Roland Garros consiguió dos triunfos revitalizantes en medio de su muy mala temporada.
La caída frente al quinto del ranking mundial no deja de ser lógica para Schwartzman, que en Roland Garros consiguió dos triunfos revitalizantes en medio de su muy mala temporada. - Créditos: @Jean-Francois Badias

El Peque sabía que la defensa de los valiosos 180 puntos por los octavos de final del año pasado era un desafío importante (y complejo teniendo en cuenta su presente), y que, de no lograrlo, lo despojaría de un lugar entre las mejores cien raquetas del mundo. Eso sucederá: cuando se actualice el ranking, el jugador entrenado por Juan Ignacio Chela pasará del puesto 95º a aproximadamente el 105º. Desde la semana del 4 de agosto de 2014, cuando saltó del 100º al 98º, Schwartzman siempre se había mantenido en el top 100, y alcanzó su mejor posición en octubre de 2020 (8ª).

Greece's Stefanos Tsitsipas plays a shot against Argentina's Diego Schwartzman during their third round match of the French Open tennis tournament at the Roland Garros stadium in Paris, Friday, June 2, 2023. (AP Photo/Jean-Francois Badias)
Tsitsipas, dueño de un estupendo revés de una mano, fue superior al argentino en todos los aspectos del juego. - Créditos: @Jean-Francois Badias

Schwartzman tuvo un rendimiento opaco. Incluso, por momentos se dejó ganar por el desánimo. No logró sacar con seguridad; de hecho, cometió seis doble faltas, logró el 61% en primeros servicios, ganó el 58% de puntos con el primer saque y sólo el 29% con el segundo. Tsitsipas le quebró seis veces el saque. Schwartzman, que logró el mejor resultado de su carrera en torneos de Grand Slam al alcanzar las semifinales de Roland Garros 2020 y, con 23 triunfos, es el segundo argentino en victorias en el Abierto de Francia, se despidió con incertidumbre sobre el futuro. Tsitsipas, asimismo, dejó la cancha sabiendo que el austriaco Sebastian Ofner, 118º y quien venció al italiano Fabio Fognini en cinco sets, será su rival en los octavos de final (en los cuartos de final puede cruzarse con Carlos Alcaraz).

Excelente revés de Tsitsipas por fuera de la red

“El balance del torneo es positivo. Después de varios meses de irme rápido de los torneos, ganar dos partidos en Grand Slam es espectacular. Poder estar varios días en los torneos grandes te deja algo positivo. Por el lado de mi nivel, todavía tengo mucho por corregir. Hay que tomar buenas decisiones fuera de la cancha para que el juego fluya. Ahora hay que ir descansando y compitiendo, como lo hice siempre, tomando esos descansos como hice hace diez días en Mallorca, que me da un plus en el transcurso del año”, apuntó Schwartzman, en la rueda de prensa, antes de dejar Roland Garros.

Compacto de Schwartzman vs. Tsitsipas

¿Qué sensación le dejó el juego de Tsitsipas? “Es un jugador agresivo, jugamos muchas veces, le encanta dominar con su derecha. Fue un poco dificil al comienzo, me costó. Hoy estaba fresco en París, empezamos a jugar casi de noche y mi pelota corría menos. En algunos momentos, donde pude haber entrado en el partido, él no me dejó y, en otros, cometí errores. Eso me llevó a estar siempre abajo en el score y con jugadores como él es imposible de entrar”, reconoció Schwartzman, que seguirá acompañado por Chela como entrenador hasta el US Open y después verán cómo siguen.

En cuanto a su futuro inmediato, Schwartzman aportó: “No tengo que pensar en el ranking y sí tengo que pensar simplemente los torneos en los que pueda entra y ser competitivo en el segundo semestre. De esa manera voy a poder ganar partidos”.