Es cierto que la Selección de béisbol de Cuba tuvo un paso intermitente durante la acción del Grupo A en el Clasico Mundial, aunque más allá de eso se dio el gusto de finalizar en la condición de líder.

Las derrotas iniciales a manos de Países Bajos e Italia sembraron dudas en el equipo del país insular, aunque lograron reponerse al vapulear a Panamá por 13-4 y, en la última jornada, 7-1 sobre el anfitrión, China Taipei.

Sobre el campo del Taichung Stadium, el elenco cubano disfrutó de los jonrones de Yoán Moncada (Chicago White Sox) y Erisbel Arruebarrena (ex Los Angeles Dodgers) para marcar diferencias contra su par taiwanés.

Con cuatro carreras en el inning inicial, dos en el siguiente y la restante en la cuarta entrada, los dirigidos por Armando Johnson encaminaron un cómodo triunfo. Así, con marca de 2-2, idéntica a la de los italianos que vencieron 7-1 a los neerlandeses, acabaron por encima de todos en su zona.

"Fue un partido difícil, ante un público que apoyó todo el tiempo a los suyos y con la exigencia de que debíamos permitir el mínimo posible de anotaciones", manifestó el estratega de Cuba, cuyo seleccionado deberá jugar ahora en Japón por los cuartos de final (aguarda rival).

“Siempre dijimos que el equipo terminaría por responder. Dijimos que los atletas, según pasaba la competencia, iban a mejorar. Así ha sido: fueron de menos a más. Mantuvieron el optimismo. Y ahora, ahí están bailando", celebró Johnson.

Foto: Kenny Hsu - CaptureAt/Getty Images