Copa Libertadores: la policía uruguaya utilizó sables para reprimir a los hinchas de Boca

La policía uruguaya con sables durante los incidentes antes del partido entre Boca y Nacional
La policía uruguaya con sables durante los incidentes antes del partido entre Boca y Nacional

El partido entre Boca y Nacional por la Copa Libertadores que tuvo lugar el jueves fue incómodo para el Xeneize por más de un motivo. Dentro de la cancha, el complicado estado del campo de juego y las arremetidas del conjunto local indicaron que se le hizo muy complicado al equipo de Jorge Almirón, que considerará el empate sin goles como un resultado más bien positivo de cara a la vuelta en la Bombonera. Pero mucho más grave fue lo que ocurrió en la previa del encuentro, cuando el gran contingente de hinchas azul y oro se vio sujeto a una fuerte represión por parte de la policía de Montevideo en la entrada del Gran Parque Central.

El motivo detrás de las disputas estuvo en la dificultad que observaron los efectivos policiales para intentar administrar el caudal de público visitante que se movilizó a la capital uruguaya para asistir al encuentro: a pesar de que apenas 2200 entradas fueron puestas a disposición, más de 5000 simpatizantes viajaron a presenciar el cruce de octavos de final. Pero en medio del uso de gases lacrimógenos y la agresividad de la policía montada, hubo un detalle que llamó poderosamente la atención tanto de los que estaban presentes como los que observaron todo por televisión: el uso de sables para intentar controlar a la multitud.

En los videos que compartieron los propios hinchas y periodistas encargados de cubrir al club de la Ribera se puede ver cómo, en un intento de regular la entrada de hinchas de Boca al estadio, los efectivos a caballo usaban el revés de sus sables para impactar a los ingresantes, una imagen sumamente atípica para el público argentino, pero que supone un accionar característico de operativos antidisturbios en eventos masivos, como partidos de fútbol y recitales de música.

En la tarde del jueves, Nacional se pronunció oficialmente al respecto por primera vez, a partir de un comunicado en el que “repudia” los incidentes, pero donde señala como culpables parciales a los hinchas visitantes: “A la llegada de miles de hinchas sin tickets para el acceso, más allá de la presencia de los que sí lo tenían, se les sumó la constatación de que hubo más de 850 códigos QR falsificados”, acusó el Bolso, aunque luego también aclaró: “Como institución deportiva que año a año recibe en su casa partidos de llaves definitorias de CONMEBOL Libertadores, Nacional pone énfasis en la seguridad y el orden de los eventos. Por ello, todo lo ocurrido ayer va en contra de los principios que promovemos y del espíritu deportivo que caracteriza a Nacional y Boca Juniors”.

“Para la planificación de los partidos de ida y vuelta de los octavos de final, se llevó a cabo un proceso de coordinación y consulta permanente entre las autoridades de ambos equipos, con el objetivo de asegurar un ambiente seguro y propicio para el desarrollo de los encuentros”, continuó el mensaje, que también resaltó la buena relación entre los dos rivales: “Ante estos lamentables sucesos, el Club Nacional de Football quiere expresar su solidaridad con la institución xeneize y sus hinchas, y ofrece toda la colaboración para ayudar a determinar las causas de los incidentes y detectar las responsabilidades correspondientes”.

Posteriormente, en una conferencia de prensa en la que hablaron varios de los encargados del operativo de seguridad, el subdirector ejecutivo de la Policía Nacional, Efraín Abreu, sostuvo la versión de los hechos que menciona el comunicado del club: “Dentro de las planificaciones que vinieron de forma previa y del intercambio de comunicaciones que hubieron con el departamento de seguridad en el deporte de Argentina, nosotros sabíamos que iba a venir gente sin entradas y que se podía dar la duplicidad de entradas también. Llegaron, aparte de los 2000 hinchas que tenían los cupos para ingresar, unos 300 hinchas que vinieron sin entradas con una clara intención de vulnerar la seguridad para poder acceder. La actuación policial se iba a ajustar para garantizar que los aforos fueran respetados, que ingresaran quienes tenían que ingresar”, aseveró.

Abreu también confirmó que hay dos detenidos como consecuencia de los disturbios; dos simpatizantes de Nacional y uno de Boca. “Se generó una situación en la cual quisieron entrar vía avalancha, eso hizo que determinados funcionarios se apartaran. Y la policía, en su trabajo rutinario, tuvo que cerrar la puerta 2 y hacer que el acceso fuera todo por puerta 1. De ahí surge uno de los detenidos de Nacional. Se siguió por la puerta 1, que también tuvo intención de avalancha, pero que fue controlada por la policía”, explicó.