Cooper Kupp, el jugador que no surgió de la élite y pasó a ser leyenda del Super Bowl

Cooper Kupp, el reciente campeón de la NFL y MVP del Super Bowl LVI con los LA Rams, no proviene de una de esas universidades o conferencias que se cuentan con los dedos de una mano, que son consideradas como auténticas fábricas de estrellas y que surten de talento a la NFL con sus exitosos programas como LSU, Florida, Ohio State, Michigan, USC u Oregon, que juegan en la SEC, el Big 10 o el PAC 12.

El receptor abierto de Los Ángeles Rams tomó otro camino para llegar a la NFL, al ser reclutado como la selección global 69 del Draft de 2017, en la tercera ronda, procedente del modesto programa de los Eastern Washington Eagles, un equipo que forma parte de la poco mencionada Big Sky Conference.

De los 27 jugadores que han llegado a la NFL procedentes de Eastern Washington, solamente 14 fueron seleccionados vía Draft, siendo el tacle ofensivo Michael Roos el que ha tenido el honor de ser elegido más pronto, cuando los Tennessee Titans lo reclutaron en la segunda ronda de 2005, selección global 41.

El resto ha tenido que ganarse un lugar en la liga ya que solo 11 de los 27 egresados de este programa han vivido una carrera en la NFL de cinco o más temporadas. Sirva todo ese contexto para poner en una perspectiva más amplia todo lo que Kupp ha conseguido pese a que, como puede verse, las probabilidades no lo acompañaban.

La forma en la que Kupp culminó la campaña de 2021 de la NFL solamente agranda su leyenda, ensalza su carrera y confirma que la temporada que tuvo no fue obra de la casualidad, acabando con 145 recepciones para 1,947 yardas, promediando 13.4 yardas por pase capturado y con 16 touchdowns.

Otra manera de dimensionar lo que ha hecho este domingo Kupp, es mencionar que se une a Joe Montana, en 1989, como los únicos jugadores en ganar el premio al Jugador Ofensivo del Año y al Jugador Más Valioso del Super Bowl en la misma temporada; es el quinto Jugador Ofensivo del Año en ganar esa distinción en la misma temporada en que su equipo ganó el Super Bowl.

También, Kupp se une a Emmitt Smith y a Terrell Davis como los únicos jugadores en la historia de la NFL en registrar 2 mil yardas desde la línea de scrimmage y 20 anotaciones en una campaña (incluyendo postemporada) en la que sus equipos ganaron el Super Bowl. Smith lo logró en 1992 y 1995; Davis en 1997 y 1998. Ambos son miembros del Salón de la Fama del Futbol Profesional.

Y esa historia no pudo tener un mejor colofón posible para Kupp, recordando que en el Super Bowl LIII, que disputaron los Rams ante los New England Patriots, el receptor tuvo que mirar desde afuera del campo debido a una lesión que le impidió jugar, estando impedido de poder hacer algo para ayudar a su equipo y evitar la derrota.

Cabe recordar que la lesión de rodilla de Odell Beckham Jr. en el segundo cuarto, el otro receptor de primera línea de los Rams, complicó las cosas para el equipo angelino, de manera que una gran parte del peso de la ofensiva se cargó en automático, e inopinadamente, a la espalda de Kupp; sin embargo, éste estuvo a la altura de las circunstancias.

Kupp se convirtió en el MVP del Super Bowl no por sus excelsos números de temporada regular sino porque fue parte crucial en la serie ofensiva que derivó en el touchdown que le dio la vuelta al marcador, atrapando un pase a espaldas del defensivo de los Cincinnati Bengals, Eli Apple, para recuperar una ventaja que habría de ser decisiva en el juego y que le permitió hallar ese otro extremo anhelado por muchos deportistas profesionales que se llama reivindicación.

Otros datos que sirven para engrosar el libro de logros de Kupp, incluyen: imponer un récord (33) de recepciones y empatado en segundo lugar para más yardas y pases de touchdown (6) atrapados en la historia de la postemporada.

Atrapó un pase de anotación en cada uno de los cuatro juegos de playoffs de los Rams, hecho que lo convierte en el segundo jugador en la historia de la liga en hacer eso en una sola postemporada, junto con el exreceptor de los Arizona Cardinals, Larry Fitzgerald.

Se convirtió en el primer jugador de la NFL en liderar la liga en yardas por recepción y ganar el Super Bowl el mismo año desde que el miembro del Salón de la Fama, el receptor de los San Francisco 49ers, Jerry Rice, lo lograra en 1994.

Definitivamente pocos hubieran apostado que un chico de los Eagles de Eastern Washington University, de la poco visible Big Sky Conference haya sido capaz de lograr tanto, y esto puede verse de dos maneras, como que incluso en estas escuelas hay un talento que clama por ser descubierto y que los jugadores que participan en programas modestos deben encontrar en Kupp la piedra angular de su motivación para incluso ser el MVP de un Super Bowl.

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