Chile y su revolución para llegar al Mundial de rugby 2023: cómo fue la reconstrucción y cuáles son los secretos de la gran sorpresa

El festejo de los chilenos tras vencer a Estados Unidos y clasificarse para disputar la Copa del Mundo Francia 2023.
El festejo de los chilenos tras vencer a Estados Unidos y clasificarse para disputar la Copa del Mundo Francia 2023.

El rugby de Chile atravesaba uno de sus peores momentos cuando en la recta final de 2018 el uruguayo Pablo Lemoine llegó para hacerse cargo de la reestructuración y, además, para ser el head coach del seleccionado. En noviembre de ese año, los Maorí All Blacks les dieron un golpe de gracia a Los Cóndores: 73-0, en un test disputado en San Carlos de Apoquindo. Tal fue la contundencia física recibida por los locales que ese partido adelantó la despedida de varios de esos jugadores. “Más bajo no se podía caer”, resume Lemoine, quien agrega: “Desde ahí arrancamos; ese fue el kilómetro 0″. Menos de cuatro años después, Chile logró clasificarse por primera vez en su historia a una Copa del Mundo. Estará en Francia 2023 en el mismo grupo que Argentina, Inglaterra, Japón y Samoa.

En agosto de ese 2018, un par de meses después de renunciar a la conducción de los Pumas, Daniel Hourcade asumió como Director de Alto Rendimiento de Sudamérica Rugby, la entidad que tomó un fuerte impulso de la mano de Agustín Pichot. Una de las primeras resoluciones del tucumano fue recomendar a Lemoine para que se haga cargo del proceso de Chile. “El gran cambio de Chile fue mental. Todo pasó por la cabeza y se dio mucho más rápido de lo esperado”, apunta quien ahora, a través de World Rugby, es el encargado de exportar el modelo de la Región a España y Portugal. Sudamérica ganó las dos plazas que había en disputa –la otra la obtuvo Uruguay en su duelo con Canadá– y por primera vez en la historia tendrá a tres selecciones en una Copa del Mundo.

El uruguayo Pablo Lemoine, el cerebro detrás de la clasificación chilena
El uruguayo Pablo Lemoine, el cerebro detrás de la clasificación chilena

En Chile hay gente de todas las edades y de todas las condiciones sociales jugando al rugby por todo el país. Tenés rugby de clubes, de colegios, social, recreativo, de quince, de seven, de mujeres. Pero estaba todo muy desordenado y la alta competencia prácticamente no existía. Por eso digo que partimos desde el fracaso”, cuenta Lemoine desde su casa en el barrio Parque Miramar, en las afueras de Montevideo. Y apunta otra dificultad con la que se encontró: “También había un elitismo fuerte que te ponía barreras, algo así como ‘dejanos como estamos’, al que hubo que sortear”.

Un momento emotivo tras cumplir el sueño del Mundial: los jugadores cantan el himno de Chile en la piscina del hotel
Un momento emotivo tras cumplir el sueño del Mundial: los jugadores cantan el himno de Chile en la piscina del hotel

Hourcade había dicho en aquel 2018 que Lemoine era el hombre ideal para reconstruir el rugby de Chile. Con el apoyo esencial del presidente de la Federación y de Sudamérica Rugby en su momento, Sebastián Piñeyrúa, Lemoine fue la cabeza del proyecto de cuatro años que llevó de nuevo a Uruguay a disputar una Copa del Mundo en 2015. Ese trabajo a largo plazo se replicó en 2019, y en 2023 los Teros estarán por primera vez en tres mundiales consecutivos.

“Llegamos a Chile con la experiencia de lo que habíamos hecho en Uruguay. Nosotros también partimos desde muy abajo. Nos habíamos caído tanto que sólo vivíamos de recordar el Mundial 2003. Así estábamos cuando arrancamos en 2011″. Lemoine convocó a quien lo había acompañado en ese proceso, su compatriota Emiliano Caffera. Y se sumaron los argentinos Nicolás Bruzzone, Rodolfo Ambrosio y Federico Todeschini y el chileno Ricardo Cortez. También apuntaron al entrenamiento mental y en un momento de la preparación para las eliminatorias contrataron al argentino Alejandro Oneto Gaona.

Emoción al cantar el himno chileno
Emoción al cantar el himno chileno - Créditos: @Twitter

Pablo Lemoine –apellido de origen francés, pero con antepasados italianos– nació el 1º de marzo de 1975 y fue uno de los uruguayos que más trascendencia adquirió en el rugby profesional. Fortísimo pilar, con los Teros jugó los Mundiales de 1999 y 2003. Su club es Montevideo Cricket Club –uno de los clubes más antiguos del mundo, fundado en 1861– y desde ahí se marchó a jugar en Bristol de Inglaterra –1998 a 2000– para luego estar en seis temporadas en el Stade Français, con el que se consagró dos veces campeón del Top 14. Fue compañero en esos equipos de numerosos Pumas como Pichot, Ignacio Corleto, Felipe Contepomi y Rodrigo Roncero, entre otros. Siguió en otros conjuntos del Pro2 y se retiró en su club. La última batalla la dio en noviembre de 2010, cuando los Teros perdieron ante Rumania la posibilidad de ir Nueva Zelanda 2011.

El himno en la piscina

En esta histórica clasificación de Chile, Lemoine rescata especialmente la importancia que tuvieron la SLAR y Sudamérica Rugby en el sentido de la pertenencia. “En medio de la pandemia, la Región se unió como ninguna otra en el mundo. Todo era incertidumbre pero igual se armó la SLAR, con burbujas y miles de dificultades, pero la jugamos. Trabajamos unidos y con un mismo objetivo, que es el crecimiento del rugby por sobre todas las cosas. Creo que dimos un mensaje muy fuerte al resto de las naciones”. La otra cara es Norteamérica, que siempre miró para otro lado. Canadá primero perdió con Uruguay y luego con Chile. Se quedó afuera. Estados Unidos cayó ante los chilenos –”los subestimaron”, agregó Hourcade– y ahora deberá buscar la última plaza que resta en un cuadrangular en Dubai con Portugal, Kenia y Hong Kong.

La euforia de los jugadores de Chile en el partido decisivo de la clasificación para 2023
La euforia de los jugadores de Chile en el partido decisivo de la clasificación para 2023 - Créditos: @Twitter

En estos años y en el que vendrá hasta Francia, Lemoine se la pasó yendo y viniendo desde Uruguay a Chile. Pero su ancla y su familia –su esposa y sus tres hijos– están en Montevideo. “Ahora me toca el área que menos me gusta, que es la administrativa, pero hay que organizar todo lo relativo a participar en un Mundial: desde la logística hasta el marketing y la prensa. En cuanto a la competencia, jugaremos en julio con las islas del Pacífico Sur y algún amistoso, pero no mucho más. El 2 de septiembre estaremos en Francia”.

El seleccionado chileno de rugby fue recibido en el Palacio de La Moneda por el presidente Gabriel Boric y la ministra del Deporte Alexandra Benado. Ambos prometieron ayuda estatal para el rugby. “Puede convertirse en el segundo deporte del país. El camino se abrió. Ahora viene la tarea de sostenerlo y expandirlo”, concluye Lemoine, el arquitecto de algo que él mismo define: “Los jugadores tomaron un imposible y lo hicieron posible”. El deporte es capaz de generar estas historias.

El seleccionado trasandino será contrincante de los Pumas en el grupo D de Francia 2023, al igual que Inglaterra, Japón y Samoa.
El seleccionado trasandino será contrincante de los Pumas en el grupo D de Francia 2023, al igual que Inglaterra, Japón y Samoa.