Campeón vs campeón, ¿por qué la UFC 270 es el evento de los eventos en los deportes de combate?

Cada vez que se dispute un título en peso completo, hay que dejarlo todo atrás y correr a ver la pelea. Este sábado en Anahaim, California, habrá una unificación en la categoría máxima entre el campeón regular Francis Ngannou (16-3) y Ciryl Gane (10-0), quien se convirtió en el campeón interino de la división.

El enfrentamiento en la UFC 270 resulta fascinante en el papel. Ngannou, quien asumió el trono con un nocaut sobre Stipe Miocic en marzo, es probablemente el pegaro más duro en las MMA, tal vez en todos los deportes de combate o similar al de Deontay Wilder en el boxeo.

Desde que se unió a UFC en el 2015, Ngannou conquistó victorias por nocaut sobre Curtis Blaydes (dos veces), Andrei Arlovski, Alistair Overeem, Cain Velasquez, Junior dos Santos, Jairzinho Rozenstruik y Miocic, quien hasta ese momento era considerado el más grande de todos los tiempos en el peso pesado de la empresa.

En est 2022, Ngannou aparentemente está mejor que nunca, ya que reforzó su ridículo poder con una defensa probada contra derribos y adoptó un enfoque más económico para la lucha. En esta etapa, se necesitará un guerrero especial para vencerlo.

Y aquí entra Gane. El campeón interino, que anteriormente compitió en muay thai, está invicto en MMA. Hizo su debut en UFC solo cuatro peleas en su carrera profesional y desde entonces ha obtenido victorias impresionantes sobre Tanner Boser, Junior dos Santos, Rozenstruik, Alexander Volkov y Lewis.

Como la mayoría de los pesos pesados, Gane posee mucho poder, pero sus mayores fortalezas son su golpe técnico y su sorprendente agilidad y juego de pies: se mueve extremadamente bien para un hombre de 250 libras. También tiene un conjunto de habilidades sorprendentemente completo para un luchador tan nuevo en MMA.

Si bien golpear es su pan y mantequilla, ni los derribos ni las sumisiones son inusuales para él. En resumen, parece que podría tener el arsenal perfecto para vencer a Ngannou, si puede evitar ser decapitado en llos dos primeros rounds y llevar al camerunés a aguas profundas.

Sorprendentemente, eso no es todo lo que hace que este enfrentamiento sea fascinante. Ngannou y Gane fueron ex compañeros de entrenamiento, una relación que claramente se ha exarcerbado en las últimas semanas con viejos pedazos de videos donde ambos hacen sesiones de sparrings.

El problema no es tanto Ngannou contra Gane, sino contra su antiguo maestro, Fernand López, quien acusa a su ex pupilo y actual campeón de ser malagradecido e ingrato al no mencionar nunca los esfuerzos iniciales en París para convertirle en la estrella que es hoy en día.

Como si fuera poco, Ngannou también se encuentra en medio de una acalorada disputa contractual con el UFC. Una derrota destruiría la mayor parte de su poder de negociación y de su deseo de medirse en un ring a figuras del boxeo como Tyson Fury o Wilder, lo que añade otra capa de intriga.

Es simplemente una pelea masiva con mucho en juego desde todos los ángulos imaginables.