Cambio de imagen: Los Pumas perdieron con Francia, pero dieron un paso adelante en el juego y la actitud

Tres jugadores de Los Pumas empujan para evitar el avance del francés Gael Fickou durante el partido que los galos ganaron por 29-20, disputado en el Stade de France.
FRANCK FIFE

Es preciso establecer desde dónde venían los Pumas. Entonces, aún en la derrota, vale certificar que la de París ha sido otra imagen, muy distinta, a la que se traía del Rugby Championship, hace algo más de un mes. El equipo, al que todavía le falta para dar la talla del más alto nivel, jugó durante la mayor parte del test de igual a igual ante uno de los seleccionados más poderosos del momento, y en su propia casa del Stade de France.

¿Dónde estuvo la mejora? En cómo se paró y peleó el partido. De algo los Pumas se tenían que agarrar para empezar a reconstruirse y fue en el fragor, en el mano a mano, donde le complicaron el trámite a Francia, que nunca, ni siquiera en los pocos trayectos en los que fue dominador, se sintió cómodo para desplegar a sus hábiles y veloces backs.

Julián Montoya, capitán de Los Pumas, tacklea al francés Matthieu Jalibert durante el test match que el equipo argentino perdió frente a los galos por 29 a 20.
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Julián Montoya, capitán de Los Pumas, tacklea al francés Matthieu Jalibert durante el test match que el equipo argentino perdió frente a los galos por 29 a 20. (FRANCK FIFE/)

No fue un buen partido, con muchas imprecisiones y demasiadas interrupciones para recurrir al TMO. Se jugó, especialmente al comienzo de cada tiempo, de manera alocada y, en esa marea, ninguno sacó ventaja. Quizá la ansiedad por borrar la pálida imagen de la última excursión por Australia perjudicó a los Pumas, que se pasaron de revoluciones cuando el desarrollo y el marcador pedían más cabeza fría.

La idea de Mario Ledesma de apostar a Santiago Carreras como apertura, pensando en la recta hacia la Copa del Mundo de 2023, no volvió a funcionar. El cordobés estuvo muy flojo con el pie. No despejó correctamente al touch y dos malos kicks suyos, cuando el test entraba en la parte final y el score estaba 16-13 para Francia, derivaron en 10 tantos en contra y en, prácticamente, la definición a favor de los locales. Tampoco pudo lanzar a los backs y en contadas ocasiones puso al equipo adelante.

Esa apuesta del entrenador se sabía arriesgada. Nicolás Sánchez jugó muy poco en los últimos tiempos y a los otros aperturas naturales (Domingo Miotti, Joaquín Díaz Bonilla) Ledesma no los tuvo en cuenta para jugar en el Rugby Championship y ni los citó para esta ventana. Es un doble riesgo, pues en la función de pateador queda sólo Emiliano Boffelli, quien si bien después acertó sus envíos, en el primero, factible, lo desvió. Al experimento Carreras10 habrá que darle más tiempo para una evaluación más completa.

La patada del cordobés Santiago Carreras, quien fue el apertura de Los Pumas en el partido que el seleccionado argentino perdió ante Francia por 29 a 20, en París.
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La patada del cordobés Santiago Carreras, quien fue el apertura de Los Pumas en el partido que el seleccionado argentino perdió ante Francia por 29 a 20, en París. (FRANCK FIFE/)

Está claro que el XV que empezó fue el mejor que hoy dispone el seleccionado argentino. Francisco Gómez Kodela es clave para un scrum que por lo menos en el primer tiempo volvió a ser dominador (el juvenil Thomas Gallo también rindió en el fijo, buen debut como titular), mientras que Facundo Isa le da al pack la agresividad y el tackle que necesita este nivel. Tomás Cubelli también era otra vuelta necesaria por todo lo que significa como conductor y tractor en el manejo de la base. En tanto, De la Fuente y Moroni se conocen de memoria y aportan la experiencia primordial para este momento.

De todos modos, a los Pumas les falta. Se siguen cometiendo errores de decisión y pérdidas en momentos importantes, además de penales innecesarios. Pero mejoró la obtención, la defensa fue más agresiva y si bien no se trató de jugadas elaboradas (una salida tapada por Pablo Matera, siempre una fiera, y una pelota al aire que ganó Boffelli y remató Mateo Carreras), el equipo marcó tries.

No era un partido sencillo el de París. Lo importante era mostrar que los Pumas podían salir del pozo en el que se habían metido. Después de reencontrarse con sus familias, de entrenarse sin burbujas ni protocolos y de viajar sólo un par de horas para juntarse, esta gira europea debía mostrar signos positivos para los jugadores y el staff. Algunos aparecieron hoy. Deberán ser más contundentes el sábado que viene ante Italia, el encuentro que tendría que devolver la ruta de la victoria.