Brych: adiós al escenario internacional en su campo más 'habitual'

Madrid, 8 dic (EFE).- El colegiado alemán Felix Brych dijo adiós al arbitraje internacional en el partido Real Madrid-Inter, en uno de sus escenarios 'favoritos', el Santiago Bernabéu, el estadio donde más encuentros de competiciones europeas ha dirigido.

A sus 46 años este jurista bávaro, que comenzó a dirigir en la Bundesliga en 2004, puso fin con el duelo entre madridistas e interistas a una dilatada trayectoria que comenzó, en lo que respecta a torneos continentales, el 25 de julio de 2007 con el Elfsborg Linfield (1-0)

Su primer expulsado fue el neerlandés Sander Boschker, guardameta del Twente, en el partido de la previa de la Champions en el Jose Alvalade ante el Sporting (0-0), el 29 de julio de 2009, y el último lo fue, anoche, Nicolo Barella por golpear al brasileño Militao.

Era su sexto encuentro en el feudo madridista, al que ha dirigido en total en doce ocasiones. En ningún otro campo ha arbitrado más veces en los torneos europeos. En todos los partidos el cuadro blanco salió victorioso salvo un 1-1 ante el Manchester United y el aún recordado 1-4 que le endosó el Ajax.

Brych también figura en los libros de historia del Real Madrid por ser el colegiado que dirigió la final de la Champions de 2017 en la que goleó por 4-1 al Juventus en el entonces denominado estadio del Milenio de Cardiff.

El colegiado germano ha estado muy ligado los últimos tiempos al fútbol español. Fue el que dirigió la final de la Liga Europa de 2014 en la que el Sevilla se coronó campeón ante el Benfica en la tanda de penaltis, la semifinal de la última Eurocopa en la que la Roja cayó ante Italia también en la tanda definitiva o el partido ante Suecia que significó la clasificación para el Mundial de Qatar 2022.

Era su encuentro 85 en la Liga de Campeones. También ha dirigido 15 de la Liga Europa, ha intervenido en el Mundial de Clubes, en los Mundiales de Brasil 2014 y Rusia 2018, en las Eurocopas de 2016 y 2020, en los Juegos Olímpicos de Londres, en la Copa de las Confederaciones, en la Liga de Naciones.

Se despide con la consideración de la Federación Internacional de Historia y Estadística del Fútbol (IFFHS) de mejor árbitro mundial del año, reconocimiento que recibe por segunda vez tras serlo también en 2017. Además, este organismo le eligió como mejor árbitro mundial de la década 2011-2020 y del siglo XXI 2001-2020.

Autor de un libro sobre las posibilidades del apoyo municipal al deporte profesional desde una perspectiva jurídica, tuvo una despedida tranquila salvo en el momento que tuvo que mostrar, con ayuda desde el VAR, la roja a Barella, quien ahora espera la redacción del acta para saber si podrá participar en el encuentro de vuelta de los octavos de final de la Liga de Campeones.

Salió del campo sonriente, tranquilo, conversando con unos y con otros para colgar internacionalmente el silbato.

(c) Agencia EFE