¿Es Dellavedova un jugador sucio?

Cleveland Cavaliers' Matthew Dellavedova, front, tangles with Atlanta Hawks' Kent Bazemore during the second half in Game 3 of the Eastern Conference finals of the NBA basketball playoffs Sunday, May 24, 2015, in Cleveland. (AP Photo/Tony Dejak)
Cleveland Cavaliers' Matthew Dellavedova, front, tangles with Atlanta Hawks' Kent Bazemore during the second half in Game 3 of the Eastern Conference finals of the NBA basketball playoffs Sunday, May 24, 2015, in Cleveland. (AP Photo/Tony Dejak)

 

Si no eres fanático de los Cavaliers de Cleveland, y más aún si eres aficionado de los Chicago Bulls o de los Atlanta Hawks, por ejemplo, pensarás en que el base australiano Matthew Dellavedova es un jugador sucio, poco honesto, que juega entre los límites de lo legal y lo ilegal.

Un argumento de peso para pensarlo es lo acontecido en la serie de segunda ronda de postemporada entre los Cavaliers y los Bulls, cuando en el Juego 5, en el último cuarto Dellavedova es empujado por la espalda por Taj Gibson y lo derriba, pero el australiano le aplicó unas tijeras con sus piernas, atrapando la de Gibson y el resto es historia.

 

 

Juego 3 de la Final de la Conferencia del Este. Dellavedova está, con clara y gran desventaja, de crear un espacio ante la marca de Al Horford para conseguir un rebote, el dominicano jala desde antes al australiano, ambos se enganchan en contacto físico, roce, rispidez y luego al caer Matthew, éste le dobla el tobillo al ex de Florida, pero también, lo que pasa después es historia.

 

 

Tanto Gibson como Horford, involucrados en incidentes con Dellavedova se fueron expulsados, pero la reacción tan hostil, como de Randy Orton sobre el jugador de los Cavaliers, se debe a que en el Juego 2, en una jugada similar, donde se lanzó por el balón, lastimó a Kyle Korver de la rodilla, que resultó ser catastrófica porque el estelar escolta de los Hawks se perderá lo que resta de la temporada y echarán de menos sus triples y la manera en la que hacía circular el balón.

 

 

Con estos antecedentes, Horford, un tipo usualmente de perfil bajo, moderado en sus declaraciones incluso, se salió del personaje y dejó claro que para él Dellavedova es un jugador malintencionado, algo con lo que el propio australiano y su líder dentro de los Cavs, LeBron James, no consideran justo ni certero. Todo esto se dio en la rueda de prensa al término del encuentro que se fue a tiempo extra y que ganó Cleveland, lo cual pone contra las cuerdas a los Hawks.

 

 

Al final, el juego de tintes históricos de LeBron James, con 37 puntos, 18 rebotes y 13 asistencias, el show de un solo hombre, quedó algo opacado por el tema Dellavedova.

 

Pero, en realidad, hasta antes de estos Playoffs ¿cuántas veces se había cuestionado la lealtad de Matthew Dellavedova jugando al baloncesto o cuántas veces se mencionó que cruzaba la delgada línea entre lo debido y lo indebido?

 

Se podría decir que es un jugador intenso, aguerrido, con mentalidad ganadora y con una enorme picardía, lo mismo que usan o utilizaron otros jugadores como Goran Dragic, Dennis Rodman, Bill Laimbeer, el mismo Michael Jordan u otros para sacar ventaja de sus rivales, o ¿ahora resulta que por ser el equipo de LeBron está mal?