La travesía NBA

Feb 11, 2015; New Orleans, LA, USA; New Orleans Pelicans forward Anthony Davis is seen silhouetted during introductions before a game against the Indiana Pacers at the Smoothie King Center. The Pacers defeated the Pelicans 106-93.Mandatory Credit: Derick E. Hingle-USA TODAY Sports
Feb 11, 2015; New Orleans, LA, USA; New Orleans Pelicans forward Anthony Davis is seen silhouetted during introductions before a game against the Indiana Pacers at the Smoothie King Center. The Pacers defeated the Pelicans 106-93.Mandatory Credit: Derick E. Hingle-USA TODAY Sports

 

Por Israel Germán

A menudo, un personaje público como un deportista profesional, suele no abrirse tanto a la gente, a los medios, es obvio, pues sus palabras repercuten de manera más sonora que un individuo, pero a veces, estas fronteras se rebasan y es de la manera en la que llegamos a conocer más a fondo a un individuo de esta tesitura y hasta incluso identificarnos con ellos.

La NBA, de la mano de una institución financiera reconocida en el mundo entero, hicieron un proyecto único y sumamente interesante al cual llamaron American Express Pivot, y donde se mezcla el uso de la tecnología para conocer más a fondo a algunos de los jugadores de la mejor liga de baloncesto del planeta. Todo esto se plasma en la travesía de cada uno de estos basquetbolistas que, con su estilo y cualidades, están tratando de hacer resonar su nombre en la NBA.

El ahora estelar poste de los Pelicans de Nueva Orleans, Anthony Davis, tuvo la fortuna de acompañar al equipo de Estados Unidos a los Juegos Olímpicos de Londres 2012, era el único basquetbolista universitario en ese momento en medio de un plantel repleto de estrellas.

En su travesía, Davis relata que cuando era adolescente, hubo un momento en el que creció tanto que sus padres constantemente tenían que comprarle ropa nueva porque ésta ya no le quedaba, e incluso hubo un momento en el que su padre entró a su habitación y lo vio con los pies fuera de la cama. Con una estatura nueva, también tenía que empezar de cero a jugar al baloncesto, aprender nuevas habilidades y explotar todo su talento…

Aquí, el hombre de la ceja prominente, nos cuenta su travesía con mayor detalle.

 

 

Mason Plumlee no es ahora sólo el hermano menor de los Plumlee, sino un jugador que con su arduo trabajo, día a día, se ha ido ganando un lugar dentro del equipo que apostó por él, los Nets de Brooklyn, pero a lo largo de su vida no lo había pasado bien, pues siempre había experimentado la amarga sensación de ser un jugador reserva, tragar y tragar minutos en la banca.

La relación con su hermano Miles, cuando niños, era muy áspera, siempre competían y peleaban por todo, incluso si estaban en el mismo equipo. Su padre decidió que era momento de intentar sobresalir en una universidad de prestigio. Fue a Duke, para perseguir el sueño de jugar en la NBA, y aunque no sabía si iba a ser reclutado, Brooklyn lo eligió. Tuvo un juego en su año de novato donde fue el último jugador en salir de la banca, sólo participó tres minutos. Pero una conversación con un compañero, le cambió la panorámica… y esta es su travesía.

 

 

 

El que será uno de los agentes libres más cotizados en el mercado para cuando expire esta campaña, el delantero de poder de los Portland Trail Blazers, LaMarcus Aldridge, padeció todo tipo de obstáculos hasta llegar a donde está ahora, gozando de la etiqueta de estrella en la NBA.

LaMarcus nació con un problema en el corazón, necesitaba todo tipo de cuidados, hubo incluso un momento en el que el vital órgano se detuvo, esto asustó mucho a su mamá, quien relató que le oprimió tanto el pecho que parece que fue la maniobra que lo tiene aquí y ahora.

En la Universidad de Texas, tuvo un retroceso a su sueño de ser jugador NBA, el corazón volvió a dar avisos y estuvo monitoreado muy celosamente para asegurarse de que no tuviera un infarto. Decretaron que no podría volver a jugar baloncesto de nuevo, pero este joven texano dice que cada vez que le dicen que no puede hacer algo, simplemente se motiva para hacerlo. Esta es su travesía…

 

 

 

Una de las figuras de mayor ascenso a la fama en los últimos años en la NBA es sin duda el electrizante base de los Wizards de Washington, John Wall, quien relata haber tenido una infancia muy complicada. Recuerda el egresado de Kentucky que su padre estaba en la prisión y que lo iban a visitar frecuentemente, pero también sabía que estaba enfermo de cáncer.

Rememora que su padre salió de la cárcel y tuvieron unas vacaciones que todavía sigue atesorando, porque es la última remembranza que tiene de él. Y, todos los días sin falta, se pregunta cómo serían las cosas si él estuviera aquí.

La pérdida de su padre lo llevó a ser rebelde, ingobernable, pero un buen día su madre le dijo que era necesario que empezara a escuchar y que no desperdiciara todo ese talento que tenía para jugar la basquet, de lo contrario, podría acabar como lo hizo su padre, con quien John se compara, pues dice que su parecido es enorme.

John Wall está en medio de una travesía que puede llegar muy lejos…