Una precaria planificación merma al Real Madrid

Una precaria planificación merma al Real Madrid

Si el Clásico fue un punto definitorio sobre la situación del Real Madrid, ante el Shakhtar el equipo blanco evidenció --por enésima vez esta temporada-- todos sus males en un muy corto período de tiempo.

Al final, cuando se analiza la situación, todos los males pueden achacarse a un simple motivo: La planificación de la temporada ha brillado por su ausencia.

Los signos son claros. Por un lado, las lesiones sufridas por la plantilla. Son ya 15 los episodios en los que los jugadores blancos sufren lesiones musculares en lo que va de temporada, y el último en caer ha sido Varane. Pero obviamente, y más allá de los problemas con el servicio médico del club, estos problemas vienen por la descompensación de la plantilla. Varane ha jugado un gran número de minutos está temporada, porque tanto Pepe como Ramos se han pasado este arranque de campeonato entre algodones. La misma situación ha atacado a Marcelo, que tras jugar todos los minutos posibles, cayó lesionado ante el PSG, y aunque llegó al Clásico, no pudo terminar el partido y ahora vuelve a estar convaleciente.

La falta de planificación en la plantilla ha cargado las piernas de algunos jugadores, pero también ha descargado la de otros, que no han tenido minutos de competición suficientes. Es el caso de Cheryshev, que aunque apunta maneras, no ha jugado más que los minutos de la basura en un par de partidos, o de Kovacic, que aunque jugó ante el Shakhtar, sólo ha sido titular en tres partidos, a pesar de llegar como una estrella que costó más de 30 millones.

Rafa Benítez no ha dado con la tecla tampoco en lo táctico, lo que ha hecho que la plantilla esté más que perdida. Tras apostar por un 4-2-3-1 al principio de temporada, rápido vio que Casemiro era su hombre brújula y cambió a un 4-3-3 que le dió muy buenos resultados durante casi dos meses, pero su cambio a un 4-3-3 politizado, en el que entraron todas las estrellas del club, ante FC Barcelona delató la falta de críterio del técnico, que volvió de inmediato a sus ideas ante el Shakhtar.

Lo que queda claro es que la poca planificiación está mermando las opciones del club, que está ya a seis puntos del Barcelona y que, ahora que tiene un par de partidos asequibles, está bajo mínimos por culpa de las lesiones.

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