El show de la BBC se despliega en Almería

El Real Madrid sufrió mucho para sumar su vigésima victoria de manera consecutiva esta temporada, pues el Almería se mostró como un rival duro de roer y que llegó a poner en aprietos al conjunto de Ancelotti.

El equipo merengue ha dejado el juego de control y posesión que demostró en octubre y ha vuelto a jugar al galope, como solía hacer en el último lustro, para gran beneficio de su tridente de ataque que se mueve como pez en el agua bajo estas condiciones.

Era de esperar que sin dos de sus motores creativos, como son Modric y James, el fútbol del equipo se resintiera, pero la plantilla de Ancelotti es tan amplia que, por lo menos, los resultados no se están viendo afectados.

Y es que Bale, Benzema y Ronaldo volvieron a compenetrarse a la perfección en Almeria, trenzando varias jugadas espectaculares, y culminando con el tercer tanto, obra de Ronaldo, en la que los tres atacantes se asociaron para matar el partido.

Ni siquiera los pequeños fallos de Bale en el remate fueron un impedimento para que el Real Madrid se llevara la victoria, impulsado también por un Isco magistral en la conducción, un Illarramendi creciendo a pasos agigantados, y la típica aportación de la defensa --espectacular una vez más en el corte y en la salida del balón por los laterales-- y de Iker Casillas, que incluso detuvo un penalti.

20 victorias al hilo antes de partir hacia el Mundialito. De llevarse el torneo, los de Ancelotti sumarían 22 y estarían sólo a tres del récord mundial de 25. 25, justo el número de goles que ha firmado Cristiano Ronaldo hasta el momento. Un Real Madrid que no parece cansarse de ganar.

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