España no jugará en el Bernabéu... ¿por culpa de Piqué?

Estaba previsto que el coliseo madridista fuera la sede del partido amistoso programado para el 14 de noviembre contra Inglaterra. Sin embargo, la opción se ha desestimado por una serie de motivos, entre los que podría estar la antipatía que genera el central del Barcelona en el público de la capital.

España no jugará en el Bernabéu... ¿por culpa de Piqué?

Será el estadio José Rico Pérez de Alicante el que finalmente acoja el partido amistoso entre las selecciones de fútbol de España e Inglaterra que tendrá lugar el 14 de noviembre. Siempre, claro, que la Roja se haya clasificado de antemano para la próxima Eurocopa, ya que esa fecha es la que la UEFA reserva para los partidos de repesca. No obstante, parece probable que el equipo nacional pase directamente: ahora mismo va primera en el grupo C, empatada a puntos con Eslovaquia y con tres de ventaja sobre Ucrania, que es la que iría a la eliminatoria final. Los británicos, por su parte, ya tienen la clasificación matemática.

El encuentro, en principio, estaba programado para disputarse en el estadio Santiago Bernabéu, propiedad del Real Madrid. La selección no juega en este recinto desde febrero de 2011, en un amistoso contra Colombia ganado por 1-0, con gol de Silva. Sin embargo, este lunes la Federación ha optado por cambiar la sede a la ciudad levantina.

En rigor nunca se llegó a confirmar oficialmente que el partido fuera a ser en Madrid, si bien fuentes de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) se lo habían comunicado al canal de televisión que tiene los derechos de transmisión de los partidos. Es precisamente esta falta de confirmación la que esgrime el Real Madrid para quitarse toda responsabilidad en la polémica: desde el club blanco aseguran que nunca les llegó una petición formal para que cedieran su terreno.

Se especula con varios motivos para que la RFEF haya adoptado esta decisión. Uno de ellos es la polémica existente en la actualidad con Gerard Piqué, defensa del Barcelona y habitual en las convocatorias de Del Bosque. En los últimos partidos de la selección en territorio nacional, en ciudades como León u Oviedo, el jugador ha sufrido abucheos del público, que tanto el entrenador como sus compañeros no han dudado en condenar.

Las razones de estos silbidos son variadas. Por un lado, Piqué siempre se ha significado como un defensor del "derecho a decidir" del pueblo catalán de cara a una hipotética independencia, además de haber justificado a los aficionados que pitaron el himno nacional durante la última final de Copa del Rey, lo que, para algunos, es una muestra de poco compromiso con España (algo que su rendimiento sobre el césped parece desmentir). Además, como jugador azulgrana, no se ha cortado a la hora de lanzar pullas contra el Real Madrid en momentos de euforia por sus propios éxitos o de debilidad de los blancos.

Esta última podría ser la clave: la RFEF consideraría poco conveniente meter a Piqué en un territorio tan hostil como el Bernabéu, dadas las circunstancias. No obstante, según recoge el diario El Mundo, directivos de la propia federación han desmentido informalmente esta posibilidad, alegando que si fuera esta la causa, no escogerían como alternativa Alicante, un territorio que históricamente ha tenido siempre mucha afición madridista. Además, tratándose de un amistoso, habría sido más sencillo para todos limitarse a no convocar al futbolista para este encuentro.

Otro posible desencuentro podría venir de las malas relaciones existentes en la actualidad entre la cúpula de la RFEF y la directiva madridista, en particular con su presidente Florentino Pérez. Fuentes internas hablan de "ruptura total" entre ambas entidades a raíz de episodios como la negativa blanca a acoger la última final de Copa del Rey. La relación personal entre Ángel María Villar, presidente federativo, y el mandatario madridista es muy fría desde que este último apoyara en 2004 una candidatura opositora a las elecciones del organismo que gestiona el fútbol español.

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