Luis Bedoya: Ascensión y caída de un líder

 

El dirigente presentó la dimisión a su cargo a días de una nueva presentación de la Selección en la Eliminatoria Sudamericana.
El dirigente presentó la dimisión a su cargo a días de una nueva presentación de la Selección en la Eliminatoria Sudamericana.

ASCENSION AL PODER

Poco pensaba Luis Bedoya, allá por el año 1987, cuando por primera vez tomaba contacto con el mundo del fútbol colombiano, formando parte del Comité organizador del Campeonato Suramericano Sub-20, que ese campeonato le iba a catapultar a las más altas cotas del fútbol mundial.

Su desempeño en la organización del campeonato fue tan brillante que llamó la atención de Jorge Correa Pastrana, a la sazón presidente de la Dimayor, entidad que regula el fútbol profesional en Colombia, convirtiéndose de forma inmediata en su padrino y escalando posiciones dentro de la Dimayor hasta convertirse en el presidente de la entidad cuando en 2002 Jorge Pastrana abandonó el cargo.

Luis Bedoya siguió liderando el fútbol colombiano logrando grandes éxitos económicos y en 2006 se convirtió en presidente de la Federación Colombiana de Fútbol (FCF), reemplazando a Oscar Astudillo. En ese ascenso imparable alcanzó en 2013 la vicepresidencia de la Confederación Suramericana de Fútbol (Conmebol) siendo su representante en el Comité Ejecutivo de la FIFA.

FIFAGATE

La detención el pasado mes de mayo de la cúpula ejecutiva de la FIFA en el hotel de lujo Baur au Lac en el centro de Zurich mientras celebraban una asamblea fue un terremoto que convulsionó el mundo del fútbol; ver salir esposados a representantes de la Conmebol como Rafael Esquivel, presidente de la Federación Venezolana de Fútbol y vicepresidente de la Conmebol, el uruguayo Eugenio Figueredo, ex presidente de la misma institución, Jose María Marín, ex presidente de la confederación de fútbol brasileña, hacía temer lo peor que no era otra cosa que la posible implicación de la Conmebol en casos de corrupción.

Hace unos días se hizo público que el magnate brasileño Jose Hawilla, dueño de la empresa Traffic, que ostentó los derechos de comercialización de los campeonatos organizados por la Conmebol hasta 2011 se ha convertido en la punta de lanza de los investigadores estadounidenses para tratar de cerrar la trama de corrupción. Según se ha conocido, Hawilla se habría declarado culpable de los cargos de corrupción y reconoció haber pagado sobornos a varias organizaciones incluida la FIFA como único modo de obtener contratos. También se conoce que en el escrito de acusación de la Fiscalía del Distrito de Nueva York, se involucra a la dirección de la Conmebol.

En las actuaciones se hace referencia a los más de 100 millones de dólares pagados como posibles sobornos a miembros de la Conmebol por parte de Datisa, empresa que representa los intereses de Traffic, Full Play y Torneos y Competencias, para hacerse con la exclusividad de cuatro ediciones de la Copa América que se haría efectivo a partir de la edición 2015.

DIMISION DE LUIS BEDOYA     

Días después de conocer estos hechos, Luis Bedoya presentó su dimisión el pasado lunes y lo hizo de forma irrevocable, llevaba 9 años y había sido elegido para un tercer mandato. Lo curioso de la renuncia es que la llevó a cabo mientras se encontraba en Nueva York y fue remitida el pasado sábado al comité ejecutivo. Con arreglo a los Estatutos de la Federación, Luis Bedoya ha sido reemplazado por Ramón Jesurún, que ocupa la presidencia de la Dimayor.


EFECTOS DE LA DIMISION

La partida de Luis Bedoya de la presidencia de la FCF comienza a generar el interrogante sobre la continuidad del DT argentino.
La partida de Luis Bedoya de la presidencia de la FCF comienza a generar el interrogante sobre la continuidad del DT argentino.

La dimisión de Luis Bedoya se produce cuando el combinado colombiano va a jugar la 3 y 4 jornada del Torneo de clasificación para el Mundial de Rusia 2018 y lo hará frente a dos peligrosos rivales; la selección chilena, actual campeona de la Copa América, y la siempre difícil selección Argentina. Colombia viene de haber conseguido el quinto puesto en el pasado mundial de Brasil y después de causar sensación en el torneo y en el que se consagró su jugador de referencia, el futbolista del Real Madrid, James Rodríguez.

Después del gran mundial, para el que se clasificó tras estar ausentes en los tres últimos torneos, las aguas bajan revueltas y muchos son los críticos con el entrenador argentino, Néstor Pekerman, incluso ex jugadores como el astro Faustino Asprilla han hecho una exacerbada crítica y en declaraciones al diario Mercurio ha señalado que: "No creo que el técnico termine la eliminatoria, el crédito con la Selección de Colombia se le está acabando”.

Lo cierto es que la convulsa salida de Luis Bedoya debilita mucho la posición de Pékerman, pues era su autentico valedor. Es más, fue el exdirectivo colombiano quien impuso su candidatura después de tantos años de frustración. Ahora, sin Bedoya en el poder el entrandor argentino se encuentra en la cuerda floja y cosechar malos resultados ante Chile y Argentina le situaría en el disparadero.

La salida de Bedoya no sólo cuestiona la continuidad de Néstor Pékerman, sino que deja en vilo otra serie de proyectos que había iniciado tales como la construcción de la sede en Barranquilla, después de la construida en Bogotá y que ha sido un proyecto personal de Luis Bedoya el que la selección colombiana contara con sus propias sedes. Otro de los aspectos que el ex presidente de la Federación gestionó bien fue el de las selecciones de juveniles y femeninas, los cuales han logrado magníficos resultados en los últimos años, así reestructuró las divisiones inferiores y con la Sub-17, participó en los mundiales de 2007 y 2009, siendo cuarto en este último. En mujeres, Colombia ganó el suramericano de Chile-2008 y disputó el Mundial Femenino de Nueva Zelanda.

Otro aspecto que se puede desplomar es el aspecto financiero y la estabilidad económica con la que dotó a la Federación. Bedoya consiguió explotar los derechos de mercadotecnia y logró ingresos extraordinarios con contratos con grandes marcas.

La salida de Luis Bedoya de la presidencia del fútbol colombiano genera más incertidumbres que certezas, los grandes nubarrones acechan sobre uno de los países que más aman la pelota. Sería interesante encontrar mesura en estos tiempos tan revueltos, organizando una buena sucesión del puesto que ocupaba Bedoya y, en el aspecto deportivo, que se deje trabajar a Jose Néstor Pékerman, quién ha conseguido devolver la ilusión a los aficionados colombianos, con buen fútbol, alegría y grandes resultados, hechos que le avalan como uno de los mejores entrenadores a nivel mundial.

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