"El Juicio del Siglo": O.J. Simpson y el gran escándalo del deporte

Fueron varias las noches en las que Robert se despertó de un salto, pensando que se trataba de una simple pesadilla, un sueño grotesco de esos que brotaban en su descanso de tanto en tanto, cuando abusaba de los dulces antes de irse a la cama. Sin embargo, aquel caso Simpson era tan real como el vaso con agua que sostenía mirando el ir y venir de los agentes de policía en Brentwood, Los Ángeles, el barrio donde se desencadenó la gran novela americana. Que "la realidad supera a la ficción" ya se dijo mil veces; pero como las frases no se gastan con el uso, también la aplicaremos aquí, porque realmente lo vale.

In this June 21, 1995, file photo, O.J. Simpson holds up his hands before the jury after putting on a pair of gloves similar to those allegedly used by the killer of Nicole Brown Simpson and Ronald Goldman. Linda Deutsch, an AP reporter who covered the trial, is pictured over Simpson's left shoulder in a blue suit (AP Photo/Vince Bucci, Pool, File)
In this June 21, 1995, file photo, O.J. Simpson holds up his hands before the jury after putting on a pair of gloves similar to those allegedly used by the killer of Nicole Brown Simpson and Ronald Goldman. Linda Deutsch, an AP reporter who covered the trial, is pictured over Simpson's left shoulder in a blue suit (AP Photo/Vince Bucci, Pool, File)

Una trama que lo tiene todo: sexo, violencia, racismo, suspenso e intereses varios dejaría exultante a cualquier guionista. Quienes formaron parte de esta historia, desde los abogados hasta el propio Simpson, se convirtieron -involuntariamente o no- en celebridades.

De la nada a la gloria: el deporte como tabla de salvación

Para comenzar, porque Orenthal James Simpson, más conocido como O.J. Simpson, era el símbolo del deportista exitoso surgido de la miseria y el hambre de los guetos. Nacido en 1947 en San Francisco, fue abandonado por su padre cuando tenía apenas cinco años. Creció a los golpes, formando parte de algunas pandillas y con un destino de dos únicas posibilidades: la cárcel o la muerte prematura. Sin embargo, conocer al legendario beisbolista Willie Mays en su adolescencia le hizo creer en lo "imposible"; le mostró un mundo a su alcance, donde fama y riqueza aparecían como palabras clave.

El drama de O.J. Simpson
El drama de O.J. Simpson

O.J. Simpson eligió otro camino. O, mejor, otro deporte. Fue fútbol americano y no béisbol, pero la ruta parecía ser idéntica. Cimentó una gran carrera a base de talento y esfuerzo, pisoteando humillaciones, esquivando preconceptos. Fue el mejor jugador universitario en 1968 y enseguida pasó al profesionalismo, donde se mantuvo 11 años, nueve de ellos con los Buffalo Bills. Victorias, récords y fama fue lo que acaparó, eso quería. También mucho dinero, ya que al retirarse en 1979 su fortuna estaba calculada en más de 10 millones de dólares. Una suma que seguiría incrementando aún fuera de cuadra como comentarista de las grandes cadenas de televisión, actor de películas -Towering Inferno (con Steve McQueen y Paul Newman) y La Pistola Desnuda (Leslie Nielsen), entre otras- o actor publicitario para grandes marcas.

El drama de O.J. Simpson
El drama de O.J. Simpson

Lo tenía todo, era un personaje querible, "adoptado" por millones de familias estadounidenses que lo sentían como parte de su casa, como huésped en la cotidianeidad. Entre una cosa y se había divorciado de su esposa de siempre (Marguerite Whitley) para establecer una relación con Nicole Brown, una rubia camarera de 18 años, con quien se casó en 1985 y se divorció en 1992. Fruto de ese matrimonio nacieron Sidney y Justin.

El asesinato de Brown y Goldman

En los años de convivencia entre Simpson y Brown, fueron muchas las escenas de celos, infidelidades y violencia, aún con la policía involucrada en más de una ocasión. Nadie, sin embargo, se hubiese animado a presagiar lo que poco después del divorcio ocurrió.

El 12 de junio de 1994, Nicole Brown y su amigo Ronald Goldman (modelo y aspirante a actor)  fueron asesinados brutalmente en el domicilio de la expareja de Simpson, ubicado en la Centinela Avenue. Los cadáveres tenían 18 y 19 puñaladas, respectivamente.

El drama de O.J. Simpson
El drama de O.J. Simpson

Nadie entendía bien lo que estaba sucediendo, muchos quedaron perplejos, sin poder quitar la vista de la pantalla o el oído de la radio al enterarse de semejante noticia. Todo era poco para seguir "el gran caso". La confusión aumentó cuando se ordenó la detención del propio Simpson debido a que las pruebas encontradas en la escena del crimen lo señalaban como el autor. Cinco días después, el exatleta protagonizó una de las fugas más vistas de todos los tiempos, a bordo de un Ford Bronco blanco conducido por su amigo Al Cowlings. O.J. estaba armado y se temía lo peor. La cadena KCBS (CBS) ganó la exclusiva desde su helicóptero, siguiendo al vehículo por la carretera. Enseguida, se le sumaron otras doce señales. Finalmente, Simpson se entregó. Llevaba con él 8.000 dólares, fotos familiares, un bigote postizo, un pasaporte y un revólver Smith & Wesson cargado.

"El Juicio del Siglo"

El juicio duró poco más de ocho meses y fue cubierto por más de 2.000 periodistas de todo el mundo. 150 testigos brindaron su testimonio. Muchos de los allí presentes se convirtieron en personajes famosos, para bien o para mal. Simpson fue declarado "no culpable" y libre de todos los cargos el 3 de octubre de 1995. El veredicto, seguido por 150 millones de telespectadores fue ampliamente publicitado, causó una gran polémica y los detractores de O.J. acusaron al jurado de "ignorar las pruebas".

Entre otros varios sucesos bochornosos, hubo un momento en el que el exdeportista se enfundó un guante con sangre encontrado en la escena del crimen y probó que le quedaba pequeño, queriendo desacreditar una de las pruebas fuertes de la acusación.

Simpson y el guante pequeño. 
Simpson y el guante pequeño. 

En 1997, un jurado civil de Santa Mónica, California, declaró a Simpson "responsable de la muerte de Ronald Goldman y de asalto contra Goldman y Nicole Brown". O.J. fue obligado a pagar 33.500.000 dólares por daños.

Pero Simpson y los problemas con la justicia nunca se darán una tregua, jamás. En 2007 fue detenido por robo a mano armada y secuestro en Las Vegas, acto perpetrado por un grupo de hombres. El exdeportista fue declarado culpable y condenado a "entre nueve y 33 años de cárcel", una pena que purga desde 2008 en un correccional de Nevada.

Simpon, absuelto. 
Simpon, absuelto. 

Mientras estuvo en libertad, O.J. Simpson hizo de todo, siempre ligado al espectáculo y cercano al calor de las pantallas. Simuló asesinar -con un plátano- a la presentadora de la BBC One que lo entrevistaba tarareando la banda sonora de la película Psicosis, dio una conferencia en la Oxford Union, grabó una comedia llamada Juiced y hasta anunció la publicación de un polémico libro.

Hace pocos días (sí, en marzo de 2016), se abrió una nueva viñeta en esta historia eterna y sin resolución. La policía de Los Ángeles está analizando un cuchillo encontrado en 1998 en una mansión que perteneció a O. J. Simpson. Recordemos que el arma homicida nunca fue hallada y esta nueva revelación, una exclusiva de la web TMZ, revive un caso con un enorme atractivo para el público norteamericano. ¿Habrá un nuevo capítulo en esta saga?

Video: Simpson se prueba los guantes:

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