Arantxa Sánchez Vicario no puede despedirse de su padre

Terrible episodio el que ha vivido Arantxa Sánchez Vicario. La tenista española ha sido expulsada de la funeraria cuando se disponía a darle el último adiós a su padre.

Tal y como informa Marca, todo ha sucedido en el velatorio de Les Corts en Barcelona, donde reposaban los restos mortales de Emilio Sánchez, que falleció el pasado jueves a los 83 años.

Arantxa había acudido junto a su esposo, Josep Santacana, cuando, según ha confesado la propia Sánchez Vicario a Europa Press, tuvo que abandonar la sala.

"Mis hermanos me han vetado. No quiero espectáculos".

Al parecer sólo pudo estar en el recinto durante 20 minutos. Tiempo en el que, según relata ella misma a Hola: "He abrazado a mi madre y hemos roto a llorar. No puedo despedirme de mi padre porque mis hermanos no me han dejado".

Además, como informa Europa Press, Javier Sánchez Vicario ha intentado evitar que el marido de Arantxa, Josep Santacana, entrara en la sala.

Con toda esta tensa situación la madre de Arantxa llegó a desmayarse y tuvo que ser atendida por una ambulancia. En La Razón leemos que Marisa: «Está muy cansada porque lleva tres meses en el hospital a su lado, sin moverse ni de día ni de noche; está rota, destrozada».

Es el último de los muchísimos desacuerdos y enfrentamientos entre la extenista y su familia.

Arantxa presentó en 2012 un libro en él que afirmaba que sus padres la explotaron y arruinaron. Sus hermanos lo niegan y no le perdonan el sufrimiento que les ha hecho pasar a base de demandas y declaraciones.

Un fallo multiorgánico ha terminado con la vida de el patriraca. Ni en este triste momento la paz ha podido reinar entre los Sánchez Vicario.

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