Márquez y Pacquiao recuerdan su primera batalla

Como parte de la cobertura del cuarto enfrentamiento entre el filipino Manny Pacquiao y el mexicano Juan Manuel Márquez el sábado 8 de diciembre en el MGM Grand Garden Arena en Las Vegas (HBO Pay-Per-View 9:00 p.m. ET / 6:00 p.m. hora del Pacífico), los dos púgiles recuerdan en su blogs el primer combate el 8 de mayo del 2004 en Las Vegas.

Por Juan Manuel Márquez

Yo estaba muy emocionado de enfrentar a Manny Pacquiao. En su última pelea él había subido a peso pluma y totalmente destruyó a Marco Antonio Barrera de manera impresionante. Después de haber visto esa pelea, mi entrenador Nacho Beristáin y yo entramamos más duro que nunca en el campamento para prepararme a defender mis títulos contra Pacquiao.

En el primer minuto de la pelea conseguí a Pacquiao fácilmente. Parecía muy cauteloso y decidí que sería un buen momento para ser más agresivo –como un ataque sorpresa- y atrasarlo. Pero debido a mi éxito tan temprano con mi ataque ofensivo agresivo me descuidé y Pacquiao me atrapó dos veces con golpes que no vi. Su velocidad y sus movimientos fueron extraordinarios.
 
Cada vez que me levantaba de esas dos caídas, yo estaba aún más decidido de agarrarlo. Estaba impaciente y descuidado y eso fue un error porque él me tumbó una tercera vez, pero esta vez vi el golpe llegando pero yo no pude bloquearlo. Cuando caí esa tercera vez en el primer asalto lo único en que podía pensar era en todo el trabajo que había metido para esta pelea y cómo no iba a permitir que se perdiera en el primera round.
 
Me levanté y fui a mi esquina y no me sentía mal físicamente porque mi acondicionamiento era bueno. En la esquina entre asaltos Nacho me decía que todavía quedaban 11 asaltos en esta pelea y si seguíamos la estrategia del campamento de entrenamiento, yo podía salir de ese hoyo profundo en que me había metido después de un solo asalto. 'Gana un round a la vez. Lo puedes hacer. Esta es tu pelea para ganar. Eres el mejor y más completo peleador', dijo Nacho.
 
Después de un difícil segundo round conseguí mis piernas y gané los siguientes 10 rounds. Lo ataqué antes de que se pudiera establecer y me quedé lejos de su mano izquierda. El no tenía ninguna otra arma, además de su izquierda, y no tuvo respuesta a mis contragolpes y movimiento.
 
Me levanté de tres caídas del primer round y le di una lección de boxeo durante los últimos 10 asaltos. Gané la pelea sin duda en mi mente y estoy seguro también en la mente de Pacquiao".


Por Manny Pacquiao

La primera pelea con Juan Manuel Márquez fue muy emocionante. Todo el mundo decía que era un combate entre los dos mejores del peso pluma y eso era contagioso para mí. Entrené muy duro con Freddie Roach y realmente estaba listo para esa pelea.
 
Después que Márquez se fue abajo por tercera vez en el primer round y regresé a la esquina, pensé "ya estuvo. Si tiro más izquierdas lo tengo y puedo terminar esto en el segundo round”. Freddie me estaba diciendo la misma cosa.
 
Así que tiré más izquierdas a Márquez pero el problema fue que esas veces no las conecteé. Quizás fui un poco impaciente intentando poner fin a la pelea. Pensádolo ahora, las faltas mías le dieron tiempo para recuperarse un poco y ajustar su plan de pelea contra mí.
 
Me sorprendió realmente cuánto Márquez luchó y se metió nuevamente a pelea. Realmente me impresionó. Pero mejor que eso, les dimos a los aficionados una gran pelea.

Hacia los últimas asaltos, como llevaba puestos calcetines que eran muy finos, yo había desarrollado ampollas en mis pies, haciendo muy difícil que me moviera efectivamente como lo hice en los primeras rounds. Tuve que pelear más firme de lo que habíamos entrenado. Después de la pelea, cuando me quité mis botas, mis calcetines estaban completamente gastados y ensangrentados.
 
Entrando a los últimos dos asaltos de la pelea, Freddie me dijo que tenía que realmente elevar mi juego y tomar los últimos dos rounds para "sellar el acuerdo," y lo hice. No hay dudas de que gané los dos últimos rounds y lo lastimé en el 12mo. asalto cuando él salió a lo zurdo y pude conectar más golpes de poder. Recuerdo su mirada inestable después que lo golpeé.
 
Lo llamaron un empate pero si uno de los jueces hubiera anotado el primer round correctamente 10–6 [por las tres caídas] en vez de 10-7, yo hubiera ganado la decisión. ¿Pero, de nuevo, si lo hubiera hecho, tal vez no hubiéramos tenido las peleas grandes que siguieron.