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Félix Verdejo aprendió una dura lección

El boxeador boricua Félix Verdejo posa tras la ceremonia de pesaje realizada el viernes 10 de junio para su pelea por el cetro ligero de la Organización Mundial de Boxeo ante el mexicano Juan José Martínez (AP Foto/Bebeto Matthews)
El boxeador boricua Félix Verdejo posa tras la ceremonia de pesaje realizada el viernes 10 de junio para su pelea por el cetro ligero de la Organización Mundial de Boxeo ante el mexicano Juan José Martínez (AP Foto/Bebeto Matthews)

Félix Verdejo vio entrar a su entrenador y manejador Ricky Márquez a su cuarto en el hospital donde convalecía y lo primero que salió de su boca fue: “Por cabeza dura me pasó esto”.

Fue su aceptación de que había cometido un error grave, que no solo pudo haber terminado con su prometedora carrera en el boxeo, sino también con su vida.

Verdejo fue noticia el pasado 7 de agosto, no por haber sumado una nueva victoria sobre el cuadrilátero, sino porque sufrió un accidente mientras conducía una motocicleta. El prometedor púgil fue llevado al Centro Médico de San Juan, donde fue atendido por las múltiples heridas que sufrió en todo el cuerpo y especialmente una profunda cortadura en la cabeza.

Afortunadamente, las pruebas médicas a las que fue sometido no reflejaron sangrado interno ni lesiones graves y en unos días estaba en su casa. Tuvo mucha suerte.

 

Félix Verdejo
Félix Verdejo

De nada sirvieron las lecciones que le dejaron otros púgiles que pasaron por situaciones similares y otros más trágicos como el caso de Paul Williams y Diego “Chico” Corrales.

En el 2012, Williams conducía su motocicleta a exceso de velocidad cuando perdió el control en una curva y se estrelló contra un muro. El ex campeón mundial quedó paralizado de la cintura hacia abajo. Nunca recuperó movilidad en sus extremidades inferiores y quedó postrado en una silla de ruedas.

Corrales, por su parte, había maravillado el mundo del boxeo con un épico choque frente a José Luis Castillo que le ganó el reconocimiento de ser llamada la Pelea del Año 2005.

Exactamente dos años después de esa memorable noche, el 7 de mayo de 2007, Corrales se vio involucrado en un accidente con otros dos vehículos. Mientras montaba su moto, intentó rebasar a un vehículo a toda velocidad en una avenida en Las Vegas, pero impactó la parte trasera del coche y su cuerpo salió expulsado 100 pies de su motocicleta, cayó en las vías de rodaje en dirección contraria y fue atropellado por otro auto que por allí transitaba.

Una ambulancia llevó a Corrales hasta un hospital cercano, donde fue declarado muerto.

En el caso de Verdejo, la única consecuencia directa de su accidente fue haber perdido el momento más esperado por cualquier joven boxeador.

El campeón Latino de la Organización Mundial de Boxeo (OMB) tenía en agenda su primera oportunidad por un título mundial. Retaría en noviembre al monarca ligero de esa misma organización, Terry Flanagan, pero los planes se hicieron sal y agua.

En cambio, Verdejo descansará por el resto del 2016 para reponerse de las magulladuras que sufrió en el accidente e intentará retomar su carrera en el 2017.

Aprendí una gran lección. No soy perfecto. Sigo creciendo como persona y hoy estoy más comprometido que nunca con mi pueblo, con mi carrera y con todos ustedes", escribió Verdejo a sus seguidores en su cuenta de Facebook, días después del accidente.

“Estoy en pie de lucha, con nuevas cicatrices de aprendizaje para mí vida, pero más maduro, más decidido y más deseoso que nunca de darle a mi gente la alegría de un campeonato mundial”, agregó.

Con apenas 23 años, Verdejo tendrá muchas otras lecciones que aprender en su carrera. Pero sin duda, esta será una de sus mayores.

Ojalá nunca la olvide.

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