'Chocolatito' hizo historia al conquistar su cuarto cetro mundial

Si alguien tenía dudas de por qué Román “Chocolatito” González merece ser considerado uno de los mejores boxeadores libra por libra de la actualidad, la demostración que realizó el sábado frente al aguerrido mexicano Carlos “El Príncipe” Cuadras no debe dejar espacio a especulación.

En lo que fue, quizás, la pelea más dura de su carrera, González se apuntó un triunfo por decisión unánime para ceñirse a la cintura la faja que lo acredita como monarca súper mosca del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) y de paso hacer historia al convertirse en el primer púgil nicaragüense en coronarse campeón en cuatro divisiones distintas.

De esta forma, 'Chocolatito' cumplió su meta de vengar las dos derrotas que su compatriota y ex entrenador Alexis Arguello sufrió frente a Aaron Pryor en 1982 cuando intentó coronarse por cuarta ocasión.

“Siento un orgullo muy grande”, dijo un emocionado González al concluir el encuentro. “Alexis fue como un segundo padre para mí. Siempre lo admiré y lo respeté”, agregó.

Fue una dura batalla para González (46-0, 38 KO’s) ante un Cuadras más alto, más fuerte y que también estaba invicto con 35 triunfos y 27 por la vía del nocaut. 'Chocolatito', quien posee además el cetro de las 112 libras, dominó los primeros cuatro asaltos de la pelea, ante un Cuadras que respetó mucho la pegada del nicaragüense, pero fiel a su raza, no entregaría tan fácilmente su campeonato.

En el sexto asalto el azteca lastimó el ojo derecho de González y parecía por momentos que nivelaría la pelea, pero la defensa y recia pegada de 'Chocolatito' terminó imponiéndose.

En la novena vuelta, Cuadras recibió una andanada de golpes al rostro que hicieron mella. Una herida en su ceja derecha parecía el preámbulo del fin.

Y así fue.

La pelea llegó a la distancia y los jueces pasaron factura con tarjetas de 117-111, 116-112 y 115-113 a favor de González.

Ya en el camerino, González reconoció que Cuadras resultó ser un hueso duro de roer y dijo que aunque sabe que ganó sin espacio a dudas, no descarta volverlo a enfrentar próximamente.

“Fue una gran pelea y si quiere la revancha, pues, se la damos con mucho gusto. Se la merece. Es un gran campeón. Le doy todo el mérito, porque la verdad es que aguantó”, dijo González a la prensa reunida en el Inglewood Forum.

Ahora con dos títulos en su cintura, (112 libras y 115 libras), González tomará un tiempo para decidir cuál será el próximo paso, aunque por el momento se inclina por seguir en el peso súper mosca.

“Creo que nos quedamos en las 115. Vamos a ver qué pasa. Tenemos que prepararnos porque sé que vendrán peleas duras”, sentenció.

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