Yahoo Noticias La terrible situación de Paco Alcácer
El traspaso de Paco Alcácer al FC Barcelona se ha hecho oficial y pronto le escucharemos en su presentación decir que este es el día más feliz de su vida, que está oportunidad no se podía dejar escapar y que piensa pelearle un puesto a la MSN con todas sus fuerzas. Eso es, a buen seguro, lo que dirá, pero sin duda el jugador entiende a lo que viene a Barcelona.
Es normal pensar que con 23 años y un futuro brillante por delante, el delantero podrá poner en un aprieto a sus compañeros de ataque, pero las estadísticas nos cuentan que Alcácer ha necesitado cerca de 40 partidos por temporada en los últimos tres años para marcar alrededor de 15 goles cada curso. Si en el FC Barcelona, como es de esperar dada la poca afición de Luis Enrique a las rotaciones y el status de insustituibles de los tres atacantes estrella del equipo, el delantero acaba jugando más o menos la mitad de minutos (quizás repartidos en más partidos, pero contando pocas veces con los 90 minutos de un partido), su media goleadora debería subir muchísimo como para que Alcácer hiciera mella en la historia blaugrana.
Y esto es lo terrible de su situación, algo que también se puede extrapolar a su compañero André Gomes. Muy mal deben estar las cosas en Valencia para que dos de sus puntales estén dispuestos a fichar por el Barça sabiendo a ciencia cierta que van a calentar banquillo desde el primer día.
Alcácer fue el máximo goleador de España en la clasificación a la Euro 2016 y así y todo Del Bosque le dejó fuera del grupo final que disputó la cita en Francia, en favor de Aritz Aduriz. El de Torrent es una de las esperanzas con sabor a gol de La Roja, pero no es un jugador de segundas partes y mucho menos un hombre hecho (por estatura, por velocidad o por alguna otra condición inherente) para ser el plan B de un equipo al que le queden 15 minutos para luchar por un resultado positivo.
Por eso sorprende que Alcácer haya decidido dejar atrás su casa de toda la vida para meterse en una situación tan enfangosa y que podría ser desastrosa para su carrera. Otros, como Vietto, Gameiro o Yarmolenko, decidieron todo lo contrario. Ante el interés del FC Barcelona en convertirles en "el cuarto delantero" (el club no se ha cortado a la hora de dejar claro que la situación del nuevo fichaje estaría bastante lejos del césped), estos hombres decidieron buscar su destino en otros sitios, pues aunque nadie asegura la titularidad en el mundo del fútbol, hay también pocos equipos como el Barça en el sentido de contar con tres de los mejores cinco delanteros del mundo.
Quizás el valenciano acaba demostrando su valía y convence a Luis Enrique, e incluso se gana un puesto de titular, pero lo cierto es que si hubiera que poner dinero en apostar por ello, pocos estarían dispuestos a dar el paso en estos momentos.
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