El técnico y el periodista

Luis Enrique y uno de los periodistas que hacían su trabajo en la rueda de prensa previa al encuentro entre el Málaga y el Barcelona protagonizaron un momento tenso e incómodo durante la intervención del entrenador.

SANT JOAN DESPÍ (BARCELONA),  El entrenador del FC Barcelona, Luis Enrique, durante una rueda de prensa. EFE/Alejandro García
SANT JOAN DESPÍ (BARCELONA), El entrenador del FC Barcelona, Luis Enrique, durante una rueda de prensa. EFE/Alejandro García

El periodista quería conocer la fórmula secreta del técnico para obtener refuerzos en el mercado de invierno, el entrenador, con gesto irónico, se mantuvo durante más de diez segundos en silencio y  luego respondió con evidente malestar.

Una telenovela

La larga historia de amor y odio entre técnicos y periodistas tiene capítulos apasionantes cada semana, las ruedas de prensa se han convertido en parte fundamental del 'otro fútbol' el del 'entertainment business'.

El fútbol que se jugaba en la cancha durante noventa minutos dejó de existir hace más de una década, las redes sociales, la globalización televisiva, el marketing y la economía han convertido al fútbol en un producto con decenas de aristas en las que el cliente se ha diversificado.

Nuevos clientes

El verdadero fanático, el denominado 'futbolero', es solo un pedazo de la torta que se comen los clubes, la prensa y los dirigentes. Las mujeres, el 'casual fan', los fanáticos potenciales en países súperpoblados con economías emergentes, son solo algunos de los nuevos consumidores del fútbol.

YOKOHAMA (JAPÓN) 17/12/2015.- Aficionados del FC Barcelona en el Mundial de Clubes. EFE/KIYOSHI OTA
YOKOHAMA (JAPÓN) 17/12/2015.- Aficionados del FC Barcelona en el Mundial de Clubes. EFE/KIYOSHI OTA

 

A estos clientes no les interesa el 4-4-2, el orden defensivo de un equipo, las coberturas del volante de primera línea, el cambio de ritmo del atacante, ni tampoco el achique o el agrande de la zaga, sencillamente no lo entienden; ellos quieren entretenimiento, y están dispuestos a pagar por ello.

El fútbol se convirtió en una moda global, y dentro de esta categorización del juego, los futbolistas, los entrenadores y hasta los dirigentes son 'pop stars'. Su vida fuera de la cancha es a veces más importante que su rendimiento dentro del césped.

El entrenador 'pop'

En este contexto aparece el entrenador como el manager de los artistas y todo lo que diga antes y después del 'concierto' es fundamental.

Por esta razón la comparecencia de un técnico a la sala de prensa se convirtió en un ritual en el que confluyen intereses interdisciplinarios en el que hay un único foco, todas las cámaras y los micrófonos apuntan al pastor de un rebaño, al líder de una manada que tiene que mantener un equilibrio perfecto entre lo que piensa y lo que dice, porque una vez pronunciadas las palabras, cada sílaba se extenderá como un polvorín a nivel mundial en un abrir y cerrar de ojos.

Bastante presión, verdad?

Esa es solo una de las tareas cotidianas del entrenador, aparte de las ya muy complicadas de entenderse con el Directoor Deportivo y el Presidente, la mala cara de los jugadores que son suplentes, las lesiones, suspensiones, imprevistos, la planeación de cada partido, el trabajo de sicólogo y figura paternal, las habilidades de excelente comunicador, el liderazgo del grupo, entre otras cosas.

Cuestión de dos

Es fundamental entender ambas posiciones, ser periodista tampoco es fácil, hay que generar historias a diario, se requieren fuentes, disciplina, ética laboral, a veces hay que pasar horas esperando para lograr un par de minutos de declaraciones.

Son dos fuerzas que se repelen y se atraen, ambas se rechazan y a la vez se necesitan. El fútbol sin el periodismo deportivo no tendría penetración y expansión, el periodismo sin el futbolista y el entrenador sencillamente no existiría.

Sigamos disfrutando de la comedia del fútbol, al fin y al cabo como el mismo Luis Enrique dijo en una rueda de prensa anterior, qué sería del fútbol sin polémica?