Concachampions y Libertadores, realidad y sueño del fútbol mexicano

El inicio del mileno, el año 2000, marca la última aparición de un equipo de la MLS en la cima de la Concacaf, LA Galaxy conquistó la entonces Copa de Campeones al vencer al Olimpia de Honduras y desde ese entonces, 14 finales han sido disputadas en el torneo de clubes de la zona, que se renombró a Liga de Campeones en 2008 y sólo dos cuadros 'americanos' han aparecido en la lucha final por el título, Salt Lake en 2011 y Montreal Impact en 2015.

La piedra en el zapato de la MLS es la Liga MX, los equipos del fútbol mexicano tienen un dominio casi totalitario sobre sus rivales del norte. en 14 series de mano a mano disputadas en la Concachampions, han sido eliminados sólo en dos ocasiones, perdiendo sólo dos veces en casa en los 44 partidos disputados entre equipos de ambas ligas, además, con 10 títulos consecutivos de clubes en la Concacaf.

Las batallas cada vez son más cerradas y es lógico pensar que el día en que un equipo de la MLS derroque a una de la Liga MX está cerca, aunque por ahora sea sustentado más en la ley de probabilidades que en algo que se convierta en un patrón.

Video: América venció al Impact en la última final de Concacaf.

Y no es que no haya calidad en los cuadros estadounidenses, cada vez es más común ver a los equipos mexicanos comprando jugadores pertenecientes a la MLS, pero más allá del físico o la técnica, hay dos factores que intervienen para que el dominio mexicano se mantenga y que no parecen tener una fecha de caducidad. El límite salarial y el calendario.

Sí, la MLS puede atraer a un Beckham, Henry, más recientemente a un Villa, Kaká y compañía, pero al mismo tiempo la brecha entre salarios, llámese calidad, entre los jugadores franquicia y sus demás compañeros es enorme. Uno puede ganar 6 millones por temporada pero su compañero que le cede el balón no alcanza ni los 100 mil dólares anuales. Esta diferencia acorta las posibilidades de una clase media indispensable en el éxito de cualquier equipo.

Por otro lado,  las fechas de inicio y término de la liga en los Estados Unidos no van ligadas a las del resto de la zona, para no ir más lejos, la fase de cuartos de final en la Concacaf Liga Campeones, coincide con el término de la pretemporada en la MLS, cuando los equipos mexicanos ya llevan siete fechas de ritmo de competencia.

Galeria: Los grupos de la Libertadores 2016

Entre las muchas carencias de la Liga MX no están estas dos, lo que permite atraer jugadores de un nivel más cercano unos con otros, incluso pensar en contratar buenos jugadores de la MLS con salarios abajo de la media en México. Y a pesar de contar con dos torneos cortos por año, más liguilla, más Copa, más Concachampions y Libertadores, el ir a la par del calendario internacional, es una preocupación menos cuando llega el momento de verse las caras con los cuadros americanos.

Mientras la MLS lucha por quitarse el asfixio de la liga mexicana, los cuadros aztecas viven la misma realidad queriendo conquistar la Libertadores. El sueño del fútbol mexicano apunta no al norte, sino al sur.

En 1998 comenzó la aventura por suelo sudamericano de los clubes mexicanos, primero con una pre-Libertadores y más tarde con entrada directa al certamen. El mayor beneficio que ha obtenido de su incursión en el torneo de clubes más viejo del continente es el roce internacional, que se puede notar justamente cuando se enfrenta a equipos de Concacaf.

Video: Tigres cayó en la última final mexicana en Libertadores ante River

El mismo yugo que sienten en la MLS por no poder superar a los cuadros aztecas, es el que está presente  en México por la Libertadores, a la que a veces, los equipos y afición mexicanos, no le ponen el interés que merece.

La justificación favorita es el arbitraje, pero para obtener el respeto que se quiere por parte del fútbol sudamericano se necesita ganar contra todo, árbitros, aficionados y equipos incluidos. Un hecho menor pero que dio un sabor de boca triunfador a la historia del fútbol azteca, fue el campeonato de Pachuca en la Copa Sudamericana en el 2006.

Video: Pachuca triunfó así en la Sudamericana

Corre la participación número 18 en Copa Libertadores con tres finales y otros cinco equipos semifinalistas, un promedio de un cuadro mexicano peleando por llegar a la final cada dos torneos, pero sin la malicia necesaria para llevarse el botín completo.

¿Qué está más cerca, la caída con los cuadros de la MLS o la conquista de la Libertadores?, Al menos este 2016, pinta para mantener el mismo ritmo en Concachampions, donde se jugaron cuatro series directas de cuartos de final entre equipos aztecas y de Estados Unidos y ningún equipo de la MLS puso sacar ventaja. Empate a dos entre Sounders y América, empate a cero entre Galaxy y Santos, y triunfos de Querétaro ante DC United y de Tigres contra Salt Lake con idéntico marcador de 2-0.

En la Libertadores, Toluca y Pumas, iniciaron bien, pero es un torneo muy exigente y sin ser aguafiestas, ninguno parece tener un plantel capaz de hacer historia y conquistar Sudamérica. Pero esto es fútbol y si usted se atreve a dar algo por hecho, es que no ha visto suficiente fútbol mexicano.

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