Bayern Munich vuelve a tomar el control de la Bundesliga gracias a la combinación de resultados que se produjeron en esta 30ª fecha. Tras el empate del viernes de Borussia Dortmund con Bochum, los de Thomas Tuchel se impusieron este domingo por 2-0 sobre Hertha Berlin y pasaron al frente a cuatro jornadas para el final del calendario.

El conjunto bávaro atraviesa una temporada irregular en relación al amplio dominio que suele demostrar en cada temporada. El cambio de entrenador superando la mitad de la campaña (salida de Julian Nagelsmann) y los números así lo reflejan: 18 ganados, 8 empatados y 4 perdidos.

Aún así, le alcanza para liderar y depender de sí mismo en busca de la consagración: acumula 62 unidades en lo más alto de la tabla, uno por delante del BVB, y su 11er. título consecutivo en la liga alemana podría darse en el mejor de los casos en dos semanas, durante la fecha 32.

El desarrollo del juego en el Allianz Arena no fue sencillo para el coloso del fútbol germano, ya que pasó más de una hora con el marcador en cero frente al último de las posiciones, que luce casi condenado al descenso (restan 12 unidades por disputar y se encuentra a 6 de la zona de salvación).

Serge Gnabry fue autor de su 10º tanto personal en la temporada al abrir la cuenta a pase de Joshua Kimmich a los 23' de la segunda mitad. Fue su vuelta al gol a nivel clubes y por la Bundesliga desde el 11 de febrero pasado. En el medio sí consiguió anotar ante el PSG por la Champions League (en marzo) y, con la Selección alemana, en la derrota 3-2 a manos de Bélgica en un amistoso el 28/3.

Unos 10 minutos después, Kimmich volvió a asistir y esta vez fue el francés Kingsley Coman el que convirtió para desatar el festejo y sellar la victoria con su séptimo grito de la campaña.

El Bayern vuelve a un lugar que conoce bien: retomó el liderazgo e intentará cuidarlo en su visita del próximo sábado a Werder Bremen (12º). Un día después, su escolta el Dortmund recibirá a Wolfsburgo.

Foto: Alexander Hassenstein/Getty Images