El béisbol, un deporte popular pero ya no dominante, busca recuperar su genialidad

Benny Lei, quien es taiwanés, durante un juego de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional en el Dodger Stadium en Los Ángeles el miércoles 20 de octubre de 2021 (Michael Owens / The New York Times).
Benny Lei, quien es taiwanés, durante un juego de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional en el Dodger Stadium en Los Ángeles el miércoles 20 de octubre de 2021 (Michael Owens / The New York Times).

BOSTON — En todo Estados Unidos, el béisbol, considerado durante mucho tiempo el pasatiempo nacional, sigue siendo popular en la mayoría de los casos. Millones de personas van a los juegos cada año, otros millones más los ven por televisión, y algunos centrarán su atención en el Clásico de Otoño, la Serie Mundial 117, que comienza el martes en Houston.

Sin duda, Termarr Johnson, un novato y quizás el mejor aspirador a campocorto en Estados Unidos, estará viendo la Serie Mundial. Pero si le preguntas a Johnson si sus compañeros de la escuela secundaria en Atlanta son aficionados al deporte que quizás lo convierta en una de las mejores selecciones del draft del próximo año, Johnson sabe muy bien cuál es la respuesta.

“Les gusta más el fútbol americano y el baloncesto”, dijo. “Pero eso está bien. De todos modos, amo el béisbol”.

A pesar de todo su pasado histórico, el béisbol ya no ocupa un papel central en la conciencia nacional, según indicadores como la asistencia a partidos en los últimos años y la relevancia en las redes sociales. A estas alturas, las razones son consabidas: el juego compite con una infinidad de opciones deportivas y de entretenimiento que no existían hace décadas, y el ritmo metódico del juego aliena a algunos aficionados potenciales.

Pero también es preocupante que muchos jóvenes creen que el béisbol no es genial, que es el dominio exclusivo de ancianos nostálgicos y de los ñoños de las estadísticas. Y una gran razón para esto es la frágil relación que ha tenido el béisbol con la audiencia que por generaciones ha ayudado a definir lo que es genial de ese deporte.

Los que estudian la cultura estadounidense saben que, desde los inicios de la era del jazz, gran parte de lo que se ha considerado “genial” y “moderno”, incluidas esas mismas palabras, se remonta a los artistas y creadores negros de tendencias en la moda, la literatura y la música, incluido el jazz, el soul y el hiphop.

Los músicos de jazz de los años 40 y 50 adoraban el béisbol. Las estrellas del hiphop de hoy tienden a preferir el baloncesto y el fútbol americano.

Fernando Machuca, un latino, durante un juego de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional en el Dodger Stadium en Los Ángeles el miércoles 20 de octubre de 2021 (Michael Owens / The New York Times).
Fernando Machuca, un latino, durante un juego de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional en el Dodger Stadium en Los Ángeles el miércoles 20 de octubre de 2021 (Michael Owens / The New York Times).

“La idea de que lo negro es genial, que atraviesa la cultura y la moda del hiphop, es una parte integral de nuestra cultura estadounidense, y lo que es genial para la cultura juvenil”, dijo Matthew Briones, profesor asociado de historia estadounidense en la Universidad de Chicago, quien se especializa en la cultura afroestadounidense y la historia del béisbol. “Es un problema si no puedes conseguir una audiencia más diversa y más joven”.

Eso es importante para la MLB porque el béisbol ha perdido de manera constante su atractivo para muchos afroestadounidenses, que no ven ahora a tantos jugadores negros en el campo como hace varios años.

En 1981, más del 18 por ciento de los jugadores de las grandes ligas eran negros. Esa cifra se mantuvo hasta 1986, cuando comenzó un descenso constante. En 2021, si bien casi el 30 por ciento de los jugadores de MLB eran latinos, solo el 7 por ciento eran negros y, como resultado, el deporte parece más desconectado de las audiencias negras que en décadas pasadas.

Esos problemas, combinados con las críticas sobre cómo en la actualidad se juega el deporte y cómo se compara con otras disciplinas que tienen un ritmo más rápido, amenazan con reducir aún más el atractivo del béisbol. Major League Baseball y su Comisionado Rob Manfred, están redoblando esfuerzos para revertir esas tendencias, y esta Serie Mundial podría ser la última antes de que se promulguen cambios fundamentales.

Manfred nombró a Theo Epstein, el ejecutivo estrella que condujo tanto a los Medias Rojas de Boston como a los Cachorros de Chicago a los campeonatos de la Serie Mundial, para que pruebe métodos que aceleren el juego y lo hagan más emocionante.

Manfred también promovió a Tony Reagins, un ejecutivo de la MLB que había sido el gerente general de los Angelinos de Los Ángeles, a una posición que le permitiera ayudar al Estados Unidos negro regresar al béisbol.

“Necesitamos más jugadores afroestadounidenses en el nivel más alto del deporte”, dijo Reagins, quien es negro.

El bateador miembro del Salón de la Fama, Reggie Jackson, estuvo entre las megaestrellas más carismáticas del béisbol durante el apogeo de la representación negra en ese deporte, e incluso inspiró una barra de chocolate que lleva su nombre. Pero algunas generaciones después, la mayoría de los atletas negros han optado por otros caminos.

“¿Dónde están las minorías en el béisbol?”, preguntó Jackson, quien ahora es asesor especial de los Astros de Houston. “Sin duda, creo que eso es parte del problema, no tienes al gran atleta negro jugando béisbol. Se van a otros deportes”.

Hay muchas razones, pero incluso los líderes del béisbol reconocen que el deporte no ha hecho lo suficiente para atraer a los fanáticos negros y desarrollar a los jugadores negros. La estructura de poder del juego sigue siendo en su mayoría blanca, y muchas de sus tradiciones, desde desalentar los lanzamientos del bate hasta la canción “Take Me Out to the Ball Game”, se originaron en una época en la que el juego estaba segregado.

“El béisbol debe llegar de manera más eficaz a los hombres de clase media no blancos”, dijo Seth S. Tannenbaum, profesor asistente visitante de historia en la Universidad de Lesley que imparte un curso sobre la historia de Estados Unidos desde la perspectiva del béisbol. “Si ir al estadio de béisbol se sintiera como una experiencia más cómoda para las personas de color y las mujeres, creo que podría hacer crecer más su audiencia”.

Johnson, la estrella adolescente de Atlanta, que es afroestadounidense, dijo que asiste a los juegos cuando alguien le ofrece boletos, pero está más interesado en jugar el deporte que verlo, al igual que millones de otros niños, que siguen jugando béisbol en números más altos que los del fútbol americano.

Johnson, de 17 años, creció jugando fútbol, baloncesto, golf y béisbol con sus hermanos mayores y amigos. Su atleta favorito era la leyenda del baloncesto Kobe Bryant, y ya a una edad temprana Johnson era mejor en el baloncesto que en el béisbol.

Un momento clave llegó cuando tenía 13 años y fue presentado en uno de los nuevos programas de MLB diseñado para mejorar la visibilidad y la participación en el béisbol en el centro de las ciudades.

Lideradas por Reagins, las iniciativas están diseñadas para presentar el deporte a los jóvenes desfavorecidos de todas las razas y grupos étnicos, en especial a los niños negros, y para desarrollar jugadores talentosos.

Tales programas, como la Serie Breakthrough, el Hank Aaron Invitational y el Elite Development Invitational, son gratuitos y están produciendo jugadores de élite que no podrían haberse permitido jugar en costosos equipos que viajan mucho o contratar entrenadores privados.

Varios jugadores actuales de Grandes Ligas, como Dominic Smith y Devin Williams, pasaron por los programas, al igual que Johnson y Ed Howard, la primera selección del draft de los Cachorros en 2020.

Briones, el profesor de la Universidad de Chicago, dijo que lo que al béisbol de verdad podría servirle es una estrella negra trascendente para aumentar la visibilidad del deporte entre los afroestadounidenses. Johnson se esfuerza por ser justo eso.

“Ese es el objetivo”, dijo. “He escuchado todas las viejas historias sobre Reggie Jackson y Ken Griffey Jr., jugadores y modelos a seguir realmente increíbles, tipos que se parecen a mí. Es importante volver a esos tiempos y estoy orgulloso de ser parte de eso”.

El béisbol enfrenta desafíos en todos los niveles demográficos, en parte debido a la estructura en evolución y al ritmo del juego. En los últimos años, dicen los críticos, se ha empantanado con los ponches, los cambios defensivos extremos y los lanzadores abrumadores, poniendo menos énfasis en la magia atlética de los fildeadores.

En medio de una preponderancia de flujos de datos estadísticos, conocidos como análisis del juego, el béisbol se ha inclinado hacia más ponches, bases por bolas y jonrones a medida que se ponen menos bolas en juego dentro del terreno. Todo esto podría ayudar a explicar la caída en la asistencia que comenzó en 2008, mucho antes de que la pandemia la redujera aún más.

Entonces, durante el año pasado, Epstein y su equipo han explorado formas de hacer que el juego sea más entretenido, al tiempo que preservan su esencia. Están experimentando en las ligas menores con el tamaño y la forma de la zona de strike, con bases más grandes para reducir el espacio entre ellos, todo para ayudar a que la pelota esté más en el juego, mejorar el ritmo y obligar a que se juegue más de la manera como era en las décadas de 1970 y 1980, cuando se basaba más en los instintos de los jugadores y menos en los cálculos de datos de la oficina principal.

El béisbol también podría introducir un cronómetro de lanzamiento agresivo, asegurando que todos los lanzamientos se realicen en un tiempo de 15 segundos o 17 segundos cuando hay un corredor en la base.

La mayoría de estos ajustes requerirían la aprobación del poderoso sindicato de jugadores y es posible que nunca se implementen. Pero la voluntad de hacer modificaciones demuestra una preocupación de que el béisbol, aunque todavía es disfrutado por millones, corre el peligro de desaparecer aún más de la conversación nacional.

“El béisbol es el mejor juego del mundo, pero los cambios significativos en la forma en que ha evolucionado el juego en la última década han disminuido los aspectos del deporte que los fanáticos, con frecuencia, afirman amar más”, dijo Epstein en un mensaje de texto. “El objetivo”, agregó, “es acercarnos a la mejor versión del béisbol”.

© 2021 The New York Times Company