En el Municipal de Montilivi y por el último encuentro de la 25ª jornada de La Liga, Atlético de Madrid se impuso agónicamente por 1-0 ante Girona.

A los 25 minutos, en una de las escasas situaciones de peligro que se dieron en el primer tiempo, Yannick Carrasco probó de media distancia y su derechazo forzó una buena respuesta por parte de Paulo Gazzaniga.

El Colchonero asumió la iniciativa y controló el 56.7% de la posesión de la pelota en la etapa inicial, pero le costó traducir su dominio en el último tercio, donde careció de recursos creativos para atacar con profundidad.

En el inicio del complemento, Antoine Griezmann llegó hasta el fondo y desde la izquierda soltó un centro pasado para la aparición de Marcos Llorente, quien apareció por el segundo palo y sacó una volea que provocó otra buena intervención de Gazzaniga.

A los 68', David López observó adelantado a Jan Oblak y remató desde la mitad de la cancha, pero el arquero esloveno reaccionó con lo justo para manotear el balón por encima del travesaño.

Para el tramo final del encuentro, con el objetivo de encontrar mayor frescura en el costado ofensivo, Diego Simeone apeló a los ingresos de los argentinos Rodrigo Paul y Ángel Correa.

De todos modos, si bien los campeones del mundo no entraron mal, lo cierto es que a los hombres del Cholo les faltó ambición para ir a buscar la victoria. De hecho, el elenco local parecía más cerca de poder ganarlo sobre el final, con Oblak tapando un tiro dentro del área de Rodrigo Riquelme a los 82'.

Sin embargo, ya en tiempo de descuento y a partir de un córner desde la derecha, Correa alcanzó a puntear la pelota en el primer palo y por el segundo la empujó Álvaro Morata, que estaba en posición legítima, según determinó el VAR.

Con esta victoria sobre la hora, el Atleti estiró su invicto a nueve cotejos (seis triunfos y tres empates) y se afirmó en el tercer puesto de la tabla con 48 puntos. Girona, por su parte, se ubica en la 12ª colocación con 30 unidades.

Foto: Alex Caparros/Getty Images