Arrancó el Mundial y con una ceremonia impactante se levantó el telón de Qatar 2022

La mascota oficial del Mundial Qatar 2022
La mascota oficial del Mundial Qatar 2022 - Créditos: @MICHAEL STEELE

El sol cayó suavemente sobre el horizonte de arena. El viento cálido que sopló todo el día desde el desierto fue el marco ideal para la apertura del Mundial Qatar 2022 en el estadio Al Bayt de Doha, que combinó tradición y sobriedad, y que resultó un espectáculo impactante.

LA NACION llegó a la sede mundialista más alejada del centro de la capital qatarí luego de recorrer cerca de 30 kilómetros a través del desierto. En la línea roja del metro, el último tramo corre pegado a una impecable autopista de cinco carriles por mano. A los costados solo se ven arena y piedras, y cuesta creer que adentro del estadio Al Bayt -que se asemeja a una carpa beduina- se erija la primera sede mundialista de Medio Oriente.

Una vez adentro, Shakira sonó en los altoparlantes y todos bailaron. Entre hinchas de distintos países que llegaron para disfrutar la ceremonia inaugural, qataríes y ecuatorianos le sumaban a eso la intención de ver a sus selecciones disputar el primer partido del Mundial, un rato más tarde.

La primera ovación de la noche estalló a las 17.33 (hora local) cuando apareció el padre del actual emir, que cinco minutos después hizo su ingreso al palco de honor. Tamin bin Hamad Al Thani y el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, dieron la bienvenida a la fiesta de apertura.

El emir de Qatar, Tamim bin Hamad al-Thani, saludó a la multitud cuando llegó con el presidente de la FIFA, Gianni Infantino
El emir de Qatar, Tamim bin Hamad al-Thani, saludó a la multitud cuando llegó con el presidente de la FIFA, Gianni Infantino - Créditos: @KARIM JAAFAR

La cuenta regresiva que sonó con fuerza en el estadio Al Bayt marcó el ingreso del host, el actor de Hollywood Morgan Freeman. Con ritmos folclóricos qataríes, trajes típicos y hasta camellos sobre la lona dispuesta sobre el césped del campo de juego, los qataríes armaron su propio espectáculo.

Un “ejército” de espadas láser dio entrada a las banderas de los 32 países participantes. El despliegue comenzó con el “vamos, vamos, Argentina” del Mundial que se disputó en el país en 1978 y la siguieron el resto de los himnos mundialistas, en un variopinto popurrí de canciones. Luces de distintos colores hicieron de marco en cada una de las presentaciones de la ceremonia.

La ceremonia inaugural del Mundial Qatar 2022 incluyó un despliegue de colores
La ceremonia inaugural del Mundial Qatar 2022 incluyó un despliegue de colores - Créditos: @Thanassis Stavrakis

La segunda parte del show viró a una coreografía internacional. Al ritmo del Alé Alé, de Ricky Martin, himno de Francia 98, lo siguió el Waka Waka de Shakira, de Sudáfrica 2010, hasta llegar al Hayya Hayya, el tema oficial de Qatar 2022.

Las mascotas de todos los mundiales dominaron la escena después. Y entre los inflables de los personajes que fueron símbolo de las copas que precedieron a esta en Doha estuvo el Gauchito de Argentina 1978, con su tradicional sombrero, su camiseta albiceleste y su pañuelo amarillo. Mientras, de fondo se proyectaban imágenes de glorias de los mundiales, con Diego Maradona al frente. La siguiente ovación llegó cuando se desplegó un gigante La’ebb, la mascota de Qatar 2022, que es un turbante de color blanco, con ojos y sonrisa.

El Gauchito de Argentina 1978 estuvo en la ceremonia inaugural del Mundial Qatar 2022
El Gauchito de Argentina 1978 estuvo en la ceremonia inaugural del Mundial Qatar 2022 - Créditos: @Noushad Thekkayil

Esto dio paso al show musical de Jung Kook, el cantante de la famosa banda surcoreana BTS, quien le puso voz al arranque mundialista junto al catarí Fahad Al-Kubaisi, uno de los artistas locales más conocidos. Ambos interpretaron Dreamers, una canción lanzada horas antes para conmemorar el inicio de la Copa del Mundo.

Ya para el final de la ceremonia, llegó el turno de las palabras del emir Al Thani, que fue observado a metros por Infantino. El líder, cuestionado por Occidente pero muy querido por los locales, le dio paso al fútbol.

Jung Kook y Fahad al-Kubaisi durante su actuación en la ceremonia de apertura
Jung Kook y Fahad al-Kubaisi durante su actuación en la ceremonia de apertura - Créditos: @ODD ANDERSEN

A instantes de concluido el espectáculo, marcado por un despliegue de fuegos de artificio, los organizadores comenzaron a recoger la lona dispuesta sobre la cancha. Y durante la hora que separó la apertura del Mundial con el partido inicial entre Qatar y Ecuador, miles de qataríes (que fueron mayoría este domingo) salieron a comprar bebidas y comida en el anillo que bordea las tres bandejas de tribunas del estadio Al Bayt. Los puestos de venta, al igual que los baños y todas las instalaciones, estaban casi a estrenar. Nadie gritó ni se abalanzó en las filas.

¿Los precios? Las gaseosas y aguas pequeñas se vendieron a 15 riales (unos 1200 pesos argentinos al cambio blue). Un pancho costaba unos 2000 pesos; las hamburguesas, 3000 pesos; y los paquetes chicos de papas fritas, unos 800 pesos. Como finalmente confirmó el Comité Supremo esta semana, en los estadios no se vendió alcohol. En Al Bayt solo se conseguía la lata de medio litro de cerveza de la marca auspiciante de la FIFA, pero sin alcohol. Costaba unos 2500 pesos.

Qatar-Ecuador: los hinchas que se fueron antes y los aires acondicionados

Para el comienzo del primer partido de la Copa del Mundo, el imponente estadio estuvo casi colmado. Casi, porque se veían algunas butacas vacías en algunos sectores. El centro de la cabecera que en el primer tiempo defendió el arquero qatarí estuvo despejada durante toda la ceremonia inaugural. Se llenó recién minutos antes del pitazo inicial.

Allí se ubicó la “barra brava” local. Eran todos hombres con la camiseta bordó de Qatar, que así se diferenciaron del resto de los árabes que pintaron de blanco el estadio con sus túnicas. Acompañados por varios bombos (que la FIFA había anunciado que no serían permitidos en los estadios) saltaron y alentaron, aún con su equipo perdiendo por dos goles y jugando muy mal. Solo dejaron de animar cuando Enner Valencia marcó el primer gol a los tres minutos, pero explotaron cuando el árbitro italiano Daniele Orsato luego lo suspendió a instancias del VAR. Los otros goles del capitán del equipo ecuatoriano sí aplacaron su entusiasmo.

Los locales no pararon de alentar durante el primer tiempo
Los locales no pararon de alentar durante el primer tiempo - Créditos: @Tom Weller

Desde la cabecera opuesta llegó la contestación de los seguidores del plantel latinoamericano. Pero no fue contra los locales. Arrancaron con un “vamos ecuatorianos, que esta noche tenemos que ganar”. Enseguida, tras el primer gol de Valencia, recordaron a Chile, quien recurrió al Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) para impugnar su clasificación por la mala inclusión de un jugador. “Borombombón, borombombón, el que no salta es chileno y maricón”, cantaron los hinchas de Ecuador, que se despegaron de sus butacas tres veces durante el primer tiempo. Le siguió otro hit: “Queremos cerveza, queremos cerveza”.

Ecuador ya tiene un hit en el Mundial de Qatar 2022
Los hinchas de Ecuador gritaron contra Chile - Créditos: @FIFAWorldCup

Pese al fervor en las tribunas y también a los 27 grados de temperatura en una noche como la de este domingo en Doha -un clima ideal para ver un partido-, adentro del estadio y con parte del techo descubierto el termómetro marcó 22 grados. ¿Aire acondicionado a 19 grados en medio del desierto en un estadio mundialista? Acá es realidad.

Los anillos que rodean el estadio Al Bayt, así como las tribunas y los baños, están refrigerados. A los que vinieron en bermudas y manga corta, esta estadía en el desierto les puede resultar bastante fresca. Qatar invirtió para los ocho estadios mundialistas en potentes equipos de refrigeración, que se hicieron sentir. En los baños y los pasillos, para la próxima hay que traer una campera.

Tubos de refrigeración en los pasillos del estadio Al Bayt
Tubos de refrigeración en los pasillos del estadio Al Bayt - Créditos: @Federico Águila

La mala actuación de los locales en la primera etapa, sumada a la poca tradición futbolera en este país, tal vez hayan atentado para que miles de butacas no se completaran en el segundo tiempo. Ni siquiera el sector de la barra qatarí estuvo colmada como al comienzo. Los claros en las plateas se notaron con fuerza en los cuatro costados del estadio.

“Sí se pudo, sí se pudo”, terminaron cantando los tres mil hinchas ecuatorianos en un estadio semi vacío, cuando el referí marcó el fin del primer partido mundialista y Ecuador se impuso 2 a 0.

Gustavo Alfaro se transformó así en el primer director técnico argentino en ganar en un debut mundialista. En ese momento la mayoría de los locales que llegaron hasta la cancha ya estaban en sus casas.