Alexis Mac Allister, la solución que Lionel Scaloni encontró en el medio de la cancha y ahora es pieza clave

Alexis Mac Allister sonriente en la práctica de la selección; le dio a Scaloni una alternativa que resultó muy productiva
Alexis Mac Allister sonriente en la práctica de la selección; le dio a Scaloni una alternativa que resultó muy productiva - Créditos: @Anibal Greco

DOHA (Enviado especial).- A Alexis Mac Allister le cambió la vida en Inglaterra. Vive en una bonita ciudad universitaria que tiene como principal punto de referencia el Brighton Marine Palace and Pier, el muelle más famoso de Gran Bretaña. Construido entre 1891 y 1899, es un punto turístico muy buscado. Lo acompaña su novia, Camila Mayan, que también vino a Qatar por el Mundial. Es un hombre feliz. Y para completar las alegrías en el ámbito profesional, se convirtió en figura en su equipo en la Premier League y ahora se ganó la titularidad en la selección nacional , en la que metió su primer gol y fue decisivo para que el equipo se clasifique para los octavos de final.

En un principio, hasta su presencia en la lista de 26 parecía estar en duda. Pero sus últimos seis meses en un altísimo nivel convencieron a Scaloni, que no dudó en usarlo desde el comienzo cuando algunos de los “históricos” bajaron su nivel. “Contra Polonia tuvimos la paciencia y la tranquilidad que nos faltó en los dos primeros partidos. No sé si antes nos sentimos atados. Lo que pasa es que somos humanos, nos podemos equivocar. A veces estamos menos tranquilos o más tranquilos, como en el último partido”, analizó tras el trascendental match.

El gol que le dio tranquilidad a la Argentina contra Polonia, en el grito de Alexis Mac Allister
El gol que le dio tranquilidad a la Argentina contra Polonia, en el grito de Alexis Mac Allister - Créditos: @Getty Images

Parece increíble el recorrido de Mac Allister en las últimas tres años. Hay que trasladarse a 2020 para ver que su carrera era otra. El coronavirus ya era un tema enorme preocupación. No existía cuarentena, todavía. El 6 de febrero, la Argentina se impuso por 2 a 1 a Colombia, en Bucaramanga, y se consagró campeón del Preolímpico para Tokio (que al final se jugaron en 2021). El goleador del equipo fue él, con cuatro tantos. Jugó un enorme torneo como atacante, junto con Adolfo Gaich. En un poco menos de tres años, de aquel delantero no queda nada. Es volante central de Brighton y titular en la selección nacional.

La historia de aquella convocatoria preolímpica es mucho más amplia y merece ser recordada. El primero en llegar al conjunto xeneize fue Kevin, su hermano, en enero de 2019. Por esta contratación, el club decidió vender a Nahuel Molina que había pasado un par de temporadas a préstamo en Rosario Central y en Defensa y Justicia. Se fue a Udinese. Seis meses después llegó Alexis en un préstamo por un año. Argentinos Juniors ya negociaba con Brighton para transferirlo al exterior por 13 millones de dólares.

En todas las operaciones participaron su papá Carlos (el Colorado), Gustavo Arribas y Daniel Angelici. Después de jugar cuatro meses en gran nivel, el conjunto de la Paternal quería venderlo, pero había algunos problemas. Por el reglamento interno de la Premier League, un futbolista tiene que tener un mínimo de experiencia en su selección nacional (sea de categorías menores o mayores). Aquel Sub 23 le abrió la posibilidad a Boca, que sabía que si el pase se daba, cobraría un dinero por la rescisión del préstamo.

Alexis Mac Allister en acción en Argentina-Polonia
Alexis Mac Allister en acción en Argentina-Polonia - Créditos: @Aníbal Greco

Por eso el equipo de Gustavo Alfaro lo prestó a la selección, pese a que River, por ejemplo, no le había cedido a Gonzalo Montiel, Exequiel Palacios y Lucas Martínez Quarta. Sí permitió que viajara a Colombia Julián Álvarez, por entonces suplente en el equipo de Gallardo. Todo en plena definición de la Superliga 2019/20 (al final fue campeón Boca). Angelici viajó a Londres para ajustar los detalles del pago. No sólo no volvió a jugar en el conjunto xeneize, sino que se fue bastante enojado por la maniobra.

El equipo de la Ribera justo estaba en la transición dirigencial. La salida la concretó Angelici, pero se “ejecutó” con Jorge Amor Ameal y Riquelme ya en funciones. “Le dije a Riquelme que quería quedarme en Boca, pero a las horas me enteré que habían mandado un mail diciendo que no me iba a no ser que Brighton pusiera un millón de dólares –contó sobre aquella situación-. Sentí que no me valoraron, que lo único que querían era un poco más de plata”. Así se hizo. Boca cobró 600.000 libras, y lo dejó ir.

Graham Potter, el entrenador que acaba de pasar a Chelsea, comenzó a utilizarlo como volante central. La transformación no fue inmediata, pero se trató de un proceso en el que se fue acomodando poco a poco. Principalmente como doble pivote, compartiendo el centro del campo con el ecuatoriano Moises Caicedo. Por su buena técnica y tras agregar algo de dinámica y distribución, se convirtió en el conductor del equipo . Hasta maneja las pelotas paradas y ejecuta los penales.

Estoy orgulloso de haber conseguido esto con la selección. Primero por el debut en el Mundial, ahora por el gol. Es un sueño cumplido, y como nos pasa a todos, ahora quiero más”, se anima.

El fútbol argentino suele ser complicado muchas veces. Enrevesado y polémico. Sumerge a sus futbolistas en situaciones de tensión y malhumor. Para Mac Allister, que apenas tiene 23 años, irse a Europa significó no sólo una mejora económica, sino que logró una tranquilidad que no conocía en su vida cotidiana. Eso también invita a enfrentar los desafíos deportivos con otro ánimo. La selección ya nota los beneficios.