Abierto de Hurlingham: por fin entero, Murus Sanctus bajó al campeón y alcanzó la final

La formación completa de Murus Sanctus, que venció a Ellerstina por 13-12 y es finalista del Abierto de Hurlingham, segundo torneo de la Triple Corona.
Sergio Llamera

Murus Sanctus se presentó en sociedad. En su primer partido con su formación titular completa, mostró sus señales: eliminó a Ellerstina por 13 a 12 y jugará la final del Abierto de Hurlingham. Fue todo un golpe de autoridad de un equipo nuevo que, con la experiencia de sus jugadores, está llamado a pelearles a la Z y a La Dolfina, dominadores del alto handicap desde 2005 hasta ahora. El vencedor tendrá una oportunidad de interponerse en la alternación de conquistas entre Adolfo Cambiaso y los hermanos Pieres: el próximo sábado definirá el campeonato contra La Dolfina o La Natividad, que este domingo determinarán al ganador de la zona B y segundo finalista.

Juan Martín Nero y Pablo Mac Donough dejaron La Dolfina, poniéndole fin a un ciclo brillante, pero nunca pensaron en dejar de seguir ganando. En su ADN no está jugar por jugar. Se entienden a la perfección. A la solvencia defensiva de ambos, el hecho que se conocen de memoria y que tienen un currículum envidiable, se les sumó ayer la potencia ofensiva de Guillermo Caset. De penal, de lejos, de cerca: el Sapo dio un recital de definición en la cancha 1 de Hurlingham y consiguió 8 de los 13 goles de su equipo. Facundo Sola, el cuarto hombre, también redondeó un partido aceptable.

Jugar todos juntos por primera vez y, encima, darse el gusto de sacar del torneo a uno de los grandes candidatos fue motivo de sonrisas en el palenque de Murus Sanctus. “Muy contentos por haber jugado por primera vez con el equipo titular, casi a la mitad de la temporada. Y de haber ganado, obviamente”, dijo Caset a ESPN Polo, con la certeza de que lo mejor está por venir, y que la final está en el horizonte. Más allá, Palermo.

La clave del partido estuvo en el quinto chukker. Ellerstina verá el video una y otra vez y no entenderá cómo se fue al descanso largo dos goles arriba, justo el resultado que necesitaba para llegar a la final y, un chukker después, estaba dos goles abajo. Habrá pocos registros de un parcial de 4-0 en contra de la Z. Pero eso pasó: faltas que se transformaron en penales para el rival y errores en defensa fueron la explicación a esos seis minutos y medio de zozobra para los de negro.

La alegría de Facundo Sola en familia; el cordobés está por tercera vez en la final de un certamen de Triple Corona.
Sergio Llamera


La alegría de Facundo Sola en familia; el cordobés está por tercera vez en la final de un certamen de Triple Corona. (Sergio Llamera/)

Así como Murus Sanctus tenía a Mac Donough y Sola faltos de ritmo, Ellerstina extrañó a Nicolás Pieres, reemplazado por Alfredo Cappella Barabucci, un ex Murus Sanctus que jugó su primer partido de la temporada. El “Bombardero de Santa Fe” hizo su trabajo, y su potencia a la hora de pegarle a la bocha fue uno de los argumentos ofensivos del equipo de los Pieres, que también tuvieron el regreso de Hilario Ulloa.

“Tenemos cosas para mejorar, sin duda: más ritmo, más funcionamiento, pero se ganó, que era el objetivo”, analizó Caset, la figura del partido y autor de un golazo en el 6º chukker: amagó y remató al arco casi desde su casa. La bocha hizo una parábola perfecta para generar el aplauso unánime de la tribuna. “Hicimos fouls de más en algún momento. Estábamos bien en el juego, aunque un poquito ansiosos en los fouls, cuando ellos tenían la pelota. Hacíamos la jugada bien y por ahí no llegaban los pases correctos. Estábamos un poquito apurados, me parece. Después... Facu [Sola] y Pablo [Mac Donough] venían sin ritmo. No era fácil”, completó Caset.

Pablo Mac Donough reapareció tras un desgarro en un aductor; jugó con precaución y tiene unos días para seguir su recuperación, hasta el desenlace de Hurlingham, del próximo sábado.
Sergio Llamera


Pablo Mac Donough reapareció tras un desgarro en un aductor; jugó con precaución y tiene unos días para seguir su recuperación, hasta el desenlace de Hurlingham, del próximo sábado. (Sergio Llamera/)

Ellerstina seguirá siendo favorito por el peso de sus nombres. Tendrá más descanso que de costumbre y ese tiempo le permitirá recuperar a Nico Pieres, el mejor de los cuatro en la temporada 2020. Quizá, con él en cancha la historia frente a Murus Sanctus habría sido diferente. Ese fatídico quinto chukker vivirá en las retinas de sus jugadores por un tiempo más. Punto a su favor: nunca se dio por vencido y siempre estuvo cerca de su rival en el resultado. Esa cualidad puede ayudarlos en Palermo, el torneo que todos quieren ganar.

El resultado implica que este año no habrá campeón de la Triple Corona. También, el final de una racha iniciada en 2008: desde ese año, Ellerstina se instaló siempre en la final de Hurlingham, la antesala de Palermo. En 2021, la historia es diferente. Esta versión de Murus Sanctus llegó para quedarse y concretó lo que todos imaginaron cuando se formó a fines de 2020. Con altas aspiraciones.

Síntesis de Murus Sanctus 13 vs. Ellerstina 12

  • RS Murus Sanctus: Facundo Sola, 9; Guillermo Caset, 10; Pablo Mac Donough, 10, y Juan Martín Nero, 10. Total: 39.

  • Ellerstina: Facundo Pieres, 10; Hilario Ulloa, 10; Gonzalo Pieres (h.), 9, y Alfredo Cappella Barabucci, 8. Total: 37.

  • Progresión: Murus Sanctus, 1-2, 3-2, 4-4, 6-8, 10-8, 12-10 y 13-12.

  • Goleadores de Murus Sanctus: Sola, 1; Caset, 8 (3 de penal y 1 de córner); Mac Donough, 3, y Nero, 1. De Ellerstina: F. Pieres, 7 (6 de penal); Ulloa, 2; G. Pieres, 2, y Cappella Barabucci, 1.

  • Jueces: Gastón Lucero y Gonzalo López Vargas. Árbitro: Martín Pascual.

  • Cancha: Nº 1 de Hurlingham.