Casi 20 000 niños han sido deportados o secuestrados a Rusia desde el inicio de la guerra

Rusia ha deportado a la fuerza o secuestrado al menos 19 500 niños desde el inicio de la guerra, aseguran las autoridades ucranianas.

El Gobierno de Kiev sospecha que los menores han sido enviados a campos de reeducación donde reciben entrenamiento militar y nuevas identidades antes de ser adoptados por familias rusas.

Varias organizaciones humanitarias en Ucrania se esfuerzan por traer a casa a los niños desaparecidos. Una de ellas es Save Ukraine. Hasta ahora, la ONG Save Ukraine ha ayudado a rescatar a 118 niños desaparecidos.

"Proporcionamos todo el trabajo jurídico, ayuda psicológica si la necesitan y la ayuda financiera... pensamos en la ruta y hacemos algunos preparativos con nuestra gente, con nuestros socios", explica Olga Yerokhina, jefa de prensa de la organización.

Kiev también ha abierto centros encargados de devolver a los niños a Ucrania, pero para los pocos afortunados que consiguen regresar, esto es solo el principio.

La ONU calcula que 3,5 millones de niños ucranianos tienen necesidades entre graves y catastróficas, mientras que el 75 % de los padres afirman que sus hijos sufren traumas psicológicos.

"Esta es una de las situaciones que resultan muy delicadas para las familias. A veces, después de recuperar a sus hijos, ni siquiera quieren hablar de ello porque les preocupa que pueda surgir algo peor después, así que nos centramos en lo que llamamos reintegración, que es intentar ver dónde han estado los niños, por lo que han pasado y cómo hacer que esto simplemente desaparezca", cuenta Amjad Yamin, director de promoción, campañas, comunicación y medios de Save the Children en Ucrania.

Para hacer frente a los efectos de la guerra, Save the Children y UNICEF ofrecen apoyo para la salud física y mental, clases a distancia para niños, asesoramiento financiero y consejo a los padres y otros servicios esenciales.

"Una de las cosas más importantes para UNICEF es garantizar que, dondequiera que estén los niños, independientemente de las circunstancias, tengan la oportunidad de acceder al aprendizaje, ya sea en un entorno escolar formal o en línea", apunta Damian Rance, director de Comunicación de UNICEF en Ucrania.

Rance advierte de que las escuelas y los recursos no se recuperarán de la noche a la mañana.

"La recuperación y la reconstrucción no consisten sólo en infraestructuras, sino también en reconstruir la comunidad y la sociedad ucranianas para que se centren en los niños y sus necesidades. Y eso requiere, por supuesto, importantes recursos", agrega Rance.