NBA: Spurs y Grizzlies estrenan final del Oeste experiencia vs físico

El argentino Manu Ginóbili (I) celebra con su compañero de equipo Kawhi Leonard una conversión de los San Antonio Spurs en partido semifinal de la Conferencia Oeste de la NBA, el 6 de mayo de 2013 en San Antonio. (AFP/GETTY IMAGES | ronald martinez)

Los San Antonio Spurs y Memphis Grizzlies inician desde este domingo una serie de playoffs por la final de la Conferencia Oeste de la NBA, que podría resumirse como el enfrentamiento de la experiencia y el básquetbol de fundamentos contra el juego físico puro y duro. Los Spurs del laureado técnico Gregg Popovich han demostrado un juego basado en diferentes esquemas de defensa y constante rotación del balón, por lo que algunos los han bautizado como el Barcelona de la NBA, en referencia al famoso club catalán. La diferencia es que cuando quieren aplastar a sus rivales, los Spurs no son un equipo divertido de ver. No hay clavadas espectaculares, y salvo algunos toques mágicos del incombustible argentino Manu Ginóbili, el equipo de Popovich se limita a leer el juego rival, sin artificios ni florituras. Con esos atributos, San Antonio ha dejado en el camino a dos rivales de fuste como Los Angeles Lakers y Golden State Warriors, al primero con barrida de 4-0 y al segundo en una exigente serie que ganó 4-2. Si bien el tope contra los Lakers fue un resultado casi cantado dado lo disminuido de los angelinos por la ausencia de su estrella Kobe Bryant, el largo receso hasta que se definió su rival en semifinales les hizo comenzar algo oxidados el tope contra los superveloces y jóvenes guerreros de Golden State. San Antonio necesitó de dos tiempos extras y una gran actuación de Tim Duncan, Tony Parker y Manu Ginóbili, para ganar el primer partido contra Warriors (129-127) y cayó en el segundo (100-91), masacrado por los bases Stpehen Curry (22 puntos) y Klay Thompson (43 pts y 14 rebotes), perdiendo la ventaja de cancha. "Saqué experiencia de los primeros dos partidos, donde les dejamos muchos espacios para que sus bases pudieran trabajar. Ahora presionamos más a Curry y Thompson y no pudieron hacer su juego en zona de confort", reconoció Popovich al terminar la serie contra los Warriors. Ahora, los Spurs tiene un rival de diferentes características en los Grizzlies, el equipo más duro de pelear en esta Liga, que viene de eliminar a los campeones de la Conferencia el pasado año, los Oklahoma City Thunder y su astro Kevin Durant. No por gusto, dos de los titulares de Memphis fueron seleccionados este año al Mejor Equipo Defensivo de la NBA: el español Marc Gasol y el base Tony Allen. Gasol es el líder en bloqueos en la actual temporada, y con 18,3 puntos anotados por partido es el segundo mejor anotador del club, detrás de Zach Randolph (19,7), que por segundo año consecutivo encabeza a los reboteadores ofensivos en la campaña regular de la NBA. El base Mike Conley está con los mejores dígitos de su carrera en los playoffs (17,6 pts y 7,6 asistencias), además de tener el menor número de balones perdidos por partido entre todos los de su posición en la postemporada, con 1.9 por encuentro. Pero sin dudas, la adquisición más valiosa de los Grizzlies este año fue la del espigado alero Tayshaun Prince, exmiembro de los Detroit Pistons que ganaron el campeonato en 2004, y elegido al Mejor Equipo Defensivo de la Liga consecutivamente de 2004 a 2008. Ante esta maquinaria demoledora, los Spurs tendrán que afincarse más que nunca en Duncan, Parker y Ginóbili -el Big 3 más longevo de la NBA-, y contar con el aporte efectivo de otros elementos claves como el brasileño Thiago Splitter, que ha ido mejorando en cada salida tras regresar de una lesión, el versátil Kawhi Leonard, y el 'bombardero' de tres puntos Gary Neal. Ambos equipos salen con hambre de títulos. Los Grizzlies nunca han ganado nada, ni una corona divisional, y buscan su primer título de Conferencia y primer pasaje a una NBA Finals. Los Spurs van detrás de su quinto título del Oeste y primero desde el 2007, confiados en que cada vez que ganaron la final de Conferencia, se llevaron el campeonato de la NBA a San Antonio. El argentino Manu Ginóbili (I) celebra con su compañero de equipo Kawhi Leonard una conversión de los San Antonio Spurs en partido semifinal de la Conferencia Oeste de la NBA, el 6 de mayo de 2013 en San Antonio.