Cuando Manny era Kid Kulafu
La historia de Manny Pacquiao, campeón Welter de la Organización Mundial de Boxeo (OMB), fue llevada al cine, pero donde la historia no se basa en el Pacman, sino en Kid Kulafu, que fue su apodo cuando inició su carrera como profesional.
La cinta que ya se exhibe en su natal Filipinas a partir del miércoles pasado, mientras que en Estados Unidos y Canadá será proyectada a partir del 24 de abril, como parte de la promoción para su contienda del 2 de mayo frente a Floyd Mayweather Jr, en las Vegas, Nevada.
La cinta es un reflejo de su infancia donde reciclaba las botellas que encontraba en la calle para ganar dinero y ayudar a su familia. “Tenía todas las excusas para fracasar: familia rota, sin comida, sin casa, ningún sitio al que ir, sin dinero... pero aun así perseveró, y eso es lo que quiero que vea la gente, que hoy está donde está debido al trabajo duro", explicó el director de la cinta Paul Soriano”.
También trabajó como tendero para Mejiay recogía sacos de botellas vacías de Vino Kulafu, que devolvía a los distribuidores a cambio de los depósitos por los envases. En un principio, Kulafu era un héroe de cómic filipino similar a Tarzán.
Manny Pacquiao asesoró y colaboró en la realización de la película que muestra el mundo de pobreza y el dolor de su infancia, así como su historia de superación que lo convirtió en el único boxeador en la historia en ser campeón del mundo en ocho divisiones diferentes, uno de los deportistas mejor pagados y el miembro con mayores ingresos de la Cámara de Representantes de Filipinas.
"En realidad, Kid Kulafu es una película sobre un chico que creció sin nada", dijo Soriano. "Todo lo que tenía en realidad era un sueño, y peleó y peleó y peleó hasta que hizo realidad esos sueños". La cinta de 110 minutos se realizó durante tres años, incluyendo dos de investigación y entrevistas llenas de emoción con el boxeador, familiares, amigos y ex entrenadores, dijo el director.
Pacquiao
se sintió atraído por el boxeo tras ver cintas Betamax de combates de los pesos pesados con su tío. Mejiaanimó al joven a pelear y después le entrenó, aunque su madre detestaba ese deporte. Ella quería que su hijo fuera sacerdote, pero era demasiado pobre para meterlo en un seminario. Aun así, le inculcó una profunda espiritualidad y fe religiosa.
TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR: