Fernández pide disculpas por acciones contra los Bravos

El lanzador José Fernández está viviendo un año de ensueño con los Marlins de Miami que muy bien podría coronar con el premio de Novato del Año en la Liga Nacional.

Sin embargo, en su última apertura de la temporada el pasado jueves ya que los Marlins decidieron limitar la cantidad de entradas lanzadas en su primer año, el derecho cubano causó una polémica durante el partido contra los Bravos de Atlanta.

Fernández, quien cerró el año con marca de 12-6 y una efectividad de 2.19 -el segundo más bajo en las Grandes Ligas- luego de acreditarse el triunfo por 5-2 sobre Atlanta, se convirtió en la comidilla del día en los medios de comunicación floridanos y también a nivel nacional por sus acciones en el terreno de juego, y no precisamente por sus sólidas siete entradas lanzadas.

En la sexta entrada Fernández cedió un jonrón a Evan Gattis, quien miró brevemente hacia el lanzador, y poco después intercambió palabras con el tercera base Chris Johnson, quien fue retirado en un fly a los jardines para el tercer out, y lució agitado en el dugout.

En la parte baja del episodio, Fernández se desquitó de su molestia a palo limpio. Conectó su primer cuadrangular en las Mayores contra el abridor Mike Minor, pero cometió uno de los pecados entre las reglas no escritas del béisbol. Se quedó contemplando el bambinazo por varios segundos demás antes de iniciar su trote alrededor de las bases. Primer error.

Luego, cometió su segundo. Mientras pasaba cerca de tercera base y ante la mirada de Johnson, escupió en la antesala, un acto poco profesional ya que no hay que ser un genio para interpretar su significado como un golpe bajo.


Al llegar al plato, el receptor de los Bravos, Brian McCann, entonces lo estaba esperando para decirle un par de cosas lo que ocasionó que se vaciaran los dugouts. Al final, la sangre no llegó al río, pero el novato quedó mal parado por la situación, al punto, que reconoció su error.

Fernández describió su intercambio de palabras con McCann más como un regaño por parte del veterano por quedarse contemplando su jonrón que se interpreta como una falta de respeto hacia el lanzador.

"Fue como, 'Eres un muchacho y estás en las Grandes Ligas y tú necesitas actuar como un grandesligas'", explicó  Fernández, quien le pidió disculpas al receptor y Minor luego del encuentro. "Yo le dije (a McCann), 'Lo lamento. No soy esa clase de persona'. Estoy avergonzado al frente de mis fanáticos y mis compañeros. Es algo del cual no estoy orgulloso de haber hecho".

Aunque Johnson pudo haber provocado toda esta situación al malinterpretar el entusiasmo que muestra Fernández cuando está en el montículo ya que a veces dialoga con la oposición o sonríe al ceder un batazo o retirar un out, el novato debió actuar de forma más profesional al momento de conectar su jonrón.

En estas cosas soy "old school", de la vieja escuela. Soy de los que cuando bateas un largo batazo empiezas a correr hacia la inicial y punto. Su acto puso en una posición incómoda a sus propios compañeros ya que fácilmente pudo haberse formado una trifulca o quizás hasta iniciar un duelo de pelotazos de forma innecesaria.

Al final, lo más importante es que Fernández, quien sólo tiene 21 años, reconoció su error y pidió disculpas públicamente. El joven serpentinero por unos breves minutos mostró su inmadurez y se dejó llevar por sus emociones, pero aprendió una valiosa lección. Será un mejor jugador y persona por ello.

"Avergoncé a muchas personas. No es lo correcto para el juego", dijo Fernández a los medios. "Puedo comprometerme al 120% que nunca volverá a pasar. No me jactaré ante nadie de esa manera".
 
Errar es humano, aprender es divino. Esperamos que así sea.