Yahoo Noticias Un brasileño enfrentará a Caín Velásquez
Orlando, Florida.- El público estaba eufórico, en el octágono todavía figuraban restos de sangre que algunos gladiadores anteriores habían dejado en su camino rumbo a la victoria o en su calvario que terminó con la derrota.
Aunque el aire acondicionado trataba de hacer que la temperatura no se elevara, era evidente que el sitio estaba caliente en espera de la función de gala donde se enfrentarían Fabricio Werdum y Travis Browne.
Las luces del Amway Center se apagan, en las enormes pantallas de televisión que figuran sobre el octágono y alrededor de la arena se proyecta un video donde ambos gladiadores expresan su ambición de ganar.
El primero en salir a su cita con el destino es Travis quien, además de su larga barba, porta una playera negra de que de inmediato se desprende y cual ritual, le da una vuelta de reconocimiento al campo de batalla.
En cuestión de segundos aparece Fabricio quien muestra un rostro tenso que de inmediato intenta disimular con una sonrisa.
El réferi los llama al centro donde les recita un reglamento por demás conocido, el combate se pone en marcha y en cuestión de instantes el recinto se convierte en un manicomio donde todos gritan a su peleador favorito.
La pelea comienza con un sorprendente Browne volcado al frente haciendo que Werdum, por momentos se vea en malas condiciones, con todo y ello el primer round expira sin nada para nadie.
En el segundo capítulo los papeles se invierten y luego ser sometido a ras de lona, el gladiador de la barba larga evidencia un cansancio provocado por la escases de aire que filtra hacia sus pulmones.
De ahí en adelante la tónica del combate no varía pese a que la gente les exige a ambos peleadores lanzarse en busca de la victoria.
La contienda se alarga hasta los cinco round sin que exista un vencedor rotundo y es los jueces quienes definen unánimemente que el ganador sea Fabricio Werdum.
